No están de acuerdo en absoluto. Los intendentes justicialistas de Santa Fe se unieron para criticar, a través de un comunicado, los aumentos de la energía en un 6 por ciento y del agua, en un 19 por ciento que fueron anticipados el lunes pasado por autoridades provinciales. Aseguraron que afecta a los sectores que menos tienen y exigieron la distribución equitativa del ingreso. Desde Baigorria, el intendente Alejandro Ramos sostuvo que el gobierno ya aumentó en otras ocasiones y no cumplió con el programa de obras públicas establecido. Remarcó la falta de fondos para encarar la administración pública local.

En diálogo con el programa Diez Puntos (Radio2), Ramos habló en representación del foro de intendentes y presidentes de comunas justicialistas de Santa Fe que se opusieron a las subas en las tarifas de dos servicios esenciales para la población. “Sentimos gran disgusto porque venimos de dos años de aumentos y la realidad de las obras es nula. Coincidimos con el gobernador (Hermes Binner) en el hecho de sincerar las tasas pero no hemos tenido obras para justificar más aumentos tarifarios”, indicó.

En cuanto a la situación de Baigorria en particuar, sostuvo: “Me comprometí con el barrio Paraíso por las obras de las cloacas y no están todavía”. Indignado, planteó: “El bolsillo de la gente que paga es siempre el mismo, no tenemos un bolsillo para cada aumento”.

“Si el gobierno provincial me dijera que en Baigorria hay un plan de obras que pudiera defender sería una cosa pero la realidad es que las únicas obras que se harán serán en las ciudades importantes donde se ven”, observó y ahondó: “No hay una perspectiva de obra pública tanto como en 2009, cuando en medio de la crisis, en vez de foralecer la obra pública, no hicieron nada”.

Para el jefe de gobierno baigorriense, “los aumentos tapan huecos, como el de la empresa Aguas Santafesinas a la que el gobierno le debe 70 millones de pesos. Entonces el dinero no es para hacer obras sino para pagar deudas”. Con respecto al argumento de la desfinanciación de la empresas encargadas de prestar servicios, esgrimida desde el oficialismo, Ramos opinó: “Estoy de acuerdo pero el año pasado ya hubo aumentos y anuncios de obras y convencios sabiendo que no los iban a poder hacer”.

Luego, aseguró que en la ciudad cuentan con sólo cuatro empleados en la Empresa Provincial de la Energía (EPE) “que no dan abasto”. También apuntó sobre la escasez de personal policial. “La provincia paró todo y no cumplió con lo que prometió. No llamó a ningún intendente para explicarle nada”, terminó, tras aclar que las críticas no provienen de una cuestión partidaria.