Cada vez más gente acude a Internet de manera regular para temas relacionados a la salud. La doctora Nieca Goldberg, cardióloga de la ciudad de Nueva York, señaló que se trata de una magnífica tendencia, siempre y cuando la gente acuda a fuentes honestas y confiables para buscar ayuda. "Creo que es la ola del futuro, y teóricamente, parece una gran idea", aseguró Goldberg, vocera de la American Heart Association, profesora clínica asociada de medicina y directora médica del Programa cardiaco de mujeres del Centro médico Langone de la Universidad de Nueva York, así como autora de la Guía completa de salud para las mujeres de la doctora Nieca Goldberg.

Las interacciones en línea han abarcado una variedad de temas médicos. Por ejemplo, un programa utilizó interacciones de Internet y telefónicas con supervivientes de ataque cardiaco y pacientes cardiacos para ayudarlos a mejorar la salud de sus corazones. Un estudio encontró que la presión arterial y los niveles de colesterol de los participantes se redujeron, más de ellos dejaron de fumar y tenían un tercio menos de probabilidades de morir que pacientes cardiacos que no recibieron la atención.

Han surgido varios programas para ayudar a fumadores a abandonar el hábito. Un análisis de casi 22 ensayos clínicos encontró que los programas de cesación de tabaquismo basados en Internet y computadoras, proveyó a los fumadores con casi el doble de probabilidades de éxito que si hubieran intentado dejar el hábito sin ayuda.

Los alcohólicos también pueden encontrar respaldo en línea. Un estudio holandés encontró que uno de cada cinco bebedores en exceso que utilizaron un sitio web de autoayuda para recibir asistencia y manejar su problema reportó que habían reducido su ingesta alcohólica a niveles con menos probabilidades de causar problemas de salud.

Y se ha demostrado que las intervenciones en línea pueden también ayudar en afecciones crónicas, como la psoriasis. En Boston, un estudio encontró que la mitad de los usuarios de grupos de respaldo en línea para la psoriasis consideraban que la calidad de su vida había mejorado, y dos de cada cinco reportaron mejora en la gravedad de su psoriasis.

En algunos casos, Internet también provee motivacioners que ayudan a la gente a tener hábitos saludables. Por ejemplo, un programa de salud por correo electrónico en el lugar de trabajo desarrollado por Kaiser Permanente proveía a los participantes correos electrónicos semanales y recordatorios a media semana que fijaban metas personalizadas de salud para ellos en base a una encuesta anterior que habían rellenado. Se les exhortaba a comer más frutas y verduras, reducir su ingesta de grasas y azúcares, y hacer más ejercicio.

Un estudio del programa encontró mejoras significativas de salud entre las personas que recibían los correos electrónicos. De hecho, comían mejor y hacían más ejercicio.

El doctor Robert Mallin, profesor asociado de la Universidad Médica de Carolina del Sur, afirmó que tales programas podrían atraer a las personas a quienes no les gusta ir al médico, terapeutas o grupos de respaldo a buscar ayuda para sus problemas.

"Ciertamente hay una ventaja en tener un contacto personal cara a cara, pero también creo que la gente que nunca iría al consultorio de un médico o a una habitación con un grupo de respaldo explorará estas opciones en línea", aseguró Mallin, vocero de la American Academy of Family Physicians.

Por ejemplo, los grupos de respaldo en línea permiten a las personas reunir información y comunicarse con otros que tienen un problema similar, al mismo tiempo que retienen su anonimidad. "No se tiene que participar", dijo Mallin. "La gente no tiene ni que enterarse de que está ahí".

Sin embargo, tanto Goldberg como Mallin también expresaron inquietudes. Goldberg desea que se hagan estudios a gran escala sobre la eficacia de estos programas en línea antes de que sean utilizados a tal extremo que suplanten las vías regulares de atención de salud. Mallin se preocupa de que la gente obtenga información mala de los sitios web. "La mayor preocupación que todo el mudo tiene sobre la información de salud en la red es su nivel de exactitud", dijo. "Siempre les pido a mis pacientes que consulten conmigo sobre lo que han leído en la Internet o en uno de esos sitios de chat".

Fuente: Medline Plus – HealthDay