Una bomba explotó en la localidad irlandesa de Randalstown, debajo de un auto y un policía resultó herido de gravedad. Fue en medio de un creciente número de ataques.

Ninguna organización se atribuyó el atentado, que ocurrió en la localidad de Randalstown, condado de Antrim, al norte de Belfast, a las 6.30, informaron las autoridades.

"Este fue un intento de asesinato", dijo el jefe policial norirlandés Barry Gilligan. Un vocero policial dijo que las heridas del agente eran muy serias, informó la cadena de noticias BBC.

Un acuerdo de paz firmado en 1998 buscó detener tres décadas de enfrentamientos entre católicos y protestantes en Irlanda del Norte que dejaron 3.600 muertos, pero de todos modos se suceden con frecuencia incidentes violentos entre ambas comunidades.

La mayoría católica es partidaria de que el territorio se una con la República de Irlanda, mientras que los protestantes quieren que la región se mantenga como parte del Reino Unido.

El jefe policial Gilligan dijo que a los autores del atentado "no se les puede permitir tener éxito en traer más terror" a Irlanda del Norte, al tiempo que urgió a cualquier persona con información sobre el incidente hacerla llegar a la policía.

En octubre pasado, disidentes católicos detonaron una bomba bajo un patrullero que hirió a un policía. En marzo de 2009, grupos escindidos de la antigua organización católica antibritánica Ejército Republicano Irlandés (IRA) mataron a dos soldados británicos y un policía.

Fuente: Télam