El primer ministro italiano, Romano Prodi, presentó su renuncia al presidente de la República, Giorgio Napolitano, por una crisis que se abrió al interior del gobierno tras la derrota de la coalición de centroizquierda en una votación sobre su política exterior en el Senado.

Ahora, Napolitano "deberá decidir si existe o no una mayoría en el Senado" que apoye a Prodi, añadió. El primer ministro llegó a la sede de la presidencia a las 19.20 (hora española), pocos minutos después de que el presidente italiano regresara a Roma desde Bolonia, donde se encontraba en visita oficial.

La alianza gubernamental de La Unión se quedó a dos apoyos de la mayoría necesaria de 160 votos para sacar adelante una moción con la que pretendía respaldar la gestión del titular de Exteriores y viceprimer ministro, Massimo D´Alema. En contra votaron 136 senadores, mientras que otros 24 del opositor UDC se abstuvieron.

Antes de la votación, Franco Turigliatto, de Refundación Comunista, anunció su dimisión para no respaldar una moción con la que no estaba de acuerdo. Además, en la sesión no estuvo presente el senador vitalicio Sergio Pininfarina, que siempre se ha alineado con la mayoría en las votaciones.