La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) decidió sancionar a Rosario Central con una fecha sin público en el estadio después de la agresión sufrida por Gustavo Alfaro en el Gigante el pasado fin de semana en el partido que enfrentó al equipo rosarino con Tigre.

La medida, tomada en la reunión de comité ejecutivo, se difundió a través de la cuenta oficial de Twitter de la AFA este martes a la noche, luego de otra sanción más leve aplicada por el gobierno provincial durante la tarde. 

La sanción se hará efectiva en la quinta fecha, cuando está programado el próximo partido de local de Central frente a Temperley.

La AFA también difundió a través de Twitter los fundamentos reglamentarios de la sanción: 

Reacciones

Raúl Brogia, presidente de Rosario Central, se quejó porque consideró que la sanción "no es similar a la aplicada a otros clubes”.

“Esta pena se aplica así porque somos nosotros, pero con otros clubes no se procede de la misma manera. De todas formas tenemos cinco días para hacer un descargo", añadió en diálogo con la agencia Télam.

En tanto, el presidente de la AFA, Luis Segura, explicó: "la suspensión fue una decisión que tomé yo y después aprobó el Comité Ejecutivo, y a partir de ahora siempre se procederá de la misma manera con todos los clubes".

Pablo Farías, al frente de la Secretaría de Coordinación de Seguridad en Competencias Deportivas y Espectáculos Masivos de Santa Fe, también se refirió al tema en diálogo con el periodista Pablo Gavira (El Tres): 

La sanción de la provincia

Durante la tarde de este martes, Farías había informado en una conferencia de prensa que la sanción del gobierno provincial consistirá en la clausura de la platea baja de Cordiviola sólo por un partido. 

“Afecta a esta platea porque desde allí surgió el proyectil que se arrojó”, explicó Farías, que hizo referencia a un antecedente nacional similar de hace un año en la cancha de River, donde se inhabilitó la platea Sivori, como sanción en la que se basaron para aplicar la de Central.

Ricardo Carloni, vicepresidente del club, que participó junto a Luciano Ceffaratti en la rueda de prensa, reconoció que la medida de cerrar la platea baja de Cordiviola solo por un partido “es más leve de lo que se esperaba”, y explicó que afectará a unas 4.000 butacas. Los dirigentes centralistas reconocieron que ahora deben evaluar cómo reubicar a los socios con abono.

“Es una sanción más leve de lo que esperábamos, pero sabemos que si esto vuelve a reiterarse vendrán sanciones más duras”, reconocieron los dirigentes. Sobre la sanción que podría aplicar la AFA aseguraron no tener aún ninguna información.

Farias explicó además que en la reunión con los dirigentes centralistas, estos se comprometieron a reforzar las medidas de seguridad del Gigante, con el fin de evitar nuevas fallas, aumentando los cacheos en las entradas y restringiendo el uso de protocolos gratuitos. Además invitó a los plateistas de la zona del suceso que puedan tener datos del agresor a que brinden la información a las autoridades para que pueda ser identificado.