La agencia espacial norteamericana nunca había realizado una misión semejante desde 1971, cuando el cohete Saturno IVB del Apolo 14 se empotró en nuestro satélite natural para conocer su estructura interior. La transmisión comenzará alrededor de las 17.30 hs.

El programa incluirá imágenes en directo de la cámara de la sonda, animación de telemetría recibida en tiempo real, imágenes de las operaciones de la misión, comentarios de expertos y retransmisión del momento del impacto con imágenes recibidas en el centro Ames de la NASA y, posiblemente, del observatorio de Mauna Kea, en Hawaii.

En las imágenes, si todo se produce como se espera, veremos cómo el cohete Centaur choca contra el cráter Cabeus, el punto escogido por la NASA por ser el que tiene más posibilidades de albergar agua. El impacto levantará una polvareda de 10 kilómetros de altura, según el diario español ABC.es.

Muy cerca, la LCROSS fotografiará la colisión para la NASA TV y enviará los datos obtenidos a la Tierra. De inmediato, cruzará la nube de desperdicios y se empotrará ella misma contra el suelo. Antes, sus espectómetros deberán haber analizado la nube de partículas iluminada por el Sol, en busca de signos de agua.

"Si existe agua ahí, o cualquier otra cosa interesante, vamos a encontrarla", ha asegurado Tony Colaprete, responsable del proyecto en el centro de investigación Ames de la NASA en Moffett Field, California.

El espectáculo será seguido masivamente en Estados Unidos. Incluso la Casa Blanca preparó su propia "fiesta lunar", en la que astrónomos profesionales y aficionados desplegarán más de 20 telescopios.

El evento coincide con el 400 aniversario de la primera observación de Galileo a los cielos a través de un telescopio.