Los príncipes de Asturias presentaron hoy a su hija, la infanta Leonor, a la Virgen de Atocha y cumplieron una antigua tradición de la familia real española que se remonta al siglo XVII. El propio príncipe Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, fue presentado ante esa Virgen a los pocos días de su nacimiento, al igual que sus hermanas, las infantas Elena y Cristina. La basílica de Atocha, regenteada por la orden de los dominicos, está situada sobre un antiguo convento del centro de Madrid, en cuyo interior se venera dicha advocación de la Virgen. A la Virgen de Atocha, patrona de la Corte, acudió la princesa Letizia el 22 de mayo de 2004, el día de su boda, para depositar su ramo de novia ante esta imagen bizantina, con la esperanza de que protegiera su matrimonio. Los príncipes llegaron hoy a las 11.15 (6.15 de la Argentina) al templo con su hija, segunda en la línea de sucesión del trono de España. Felipe de Borbón y su esposa, Letizia Ortiz, fueron recibidos por el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, y numerosos ciudadanos que les mostraron su cariño a la entrada de la basílica. Leonor de Todos los Santos nació el pasado 31 de octubre en Madrid y recibió el sacramento del bautismo dos meses y medio después en una ceremonia celebrada en el Palacio de la Zarzuela, residencia de los reyes de España.