Por Matías Manna (*)

“Ganar o perder es cuestión de un detalle afortunado. Jugar bien, no. Jugar bien tendría que ser innegociable. Lo peor de perder es la odiosa sensación de vacío. Y como perder es una posibilidad real, jugar bien es lo único que asegura una modesta satisfacción incluso en la desgracia”. Tras el encuentro entre Paraguay, comandado por Gerardo Martino, y España, durante el último Mundial en Sudáfrica, el escritor y cineasta David Trueba escribía este argumento en la crónica de ese partido.

El resultado de un partido de fútbol muchas veces se decide por centímetros, como pasó esa noche de julio de 2010. Cardozo marró un penal a favor de Paraguay y, a continuación, en la misma jugada, España se encontró con un penal que sí convirtió Xabi Alonso. A treinta minutos de la finalización de ese partido, los centímetros y detalles afortunados llevaron la victoria al luego campeón del mundo. De lo que escribe Trueba, tiene que ver con los estilos. Eso es innegociable. Y de esa forma ganó el Mundial España. Pudo perder esa noche frente al actual entrenador de Newell´s, pero lo que no iba a perder era el camino que decidió potenciar. Las tres P: protagonismo con pases y posesión.

Este Newell`s del Tata juega más parecido a esa España campeona que a su Paraguay. Y coincide en algo que lo hace identificable. El de la satisfacción más allá de los centímetros. A pesar que el primer tiempo frente a Unión, gran parte del partido frente a Godoy Cruz y fragmentos en la derrota frente a All Boys exhiben mal juego y los peores minutos de Newell´s en el torneo, existirá una modesta satisfacción en que el equipo sabe a qué juega, está convencido de su forma y siempre intenta cumplir con las tres P jugando bien.

Si con la llegada de Martino el perfume del Parque de la Independencia varió, necesitaba un modelo de juego certero, firme y convincente como éste. Todo en medio de una reestructuración institucional colmada de escombros. El modelo de juego que identifica el sentir de Martino y sirve como idioma dominante en las demás estructuras del fútbol, es el esqueleto que está dando y dará el estilo de Newell´s.

Ahora bien, los resultados (esos centímetros anárquicos) ayudaron a que el ambiente del club beneficiara el desarrollo de ese estilo. Nunca olvidemos que en la primera jornada, ante un muy buen partido de Newell´s pero con un 0 a 0 final, el título en los medios era Newell´s en descenso directo o el clásico “aburrió a todos”. La voz respetada de Martino vino a dar luz que un conjunto de ideas innegociables, dan forma a un grupo de jugadores y pueden servirles de plataforma para multiplicar sus características.

Newell´s comete varios errores. El que más repitió fue el de la posesión lenta. Con escaso ritmo en los pases y en las circulaciones de la pelota, más posibilidades para que se produzca un fallo o una pérdida y el contrario lo pueda aprovechar. Así pasó frente a Unión. Pasaron cerca de veinte minutos donde Newell´s tenía la pelota pero no lograba ni superar la línea media de volantes de Unión. La pelota de un lado a otro, pero sin ritmo alto ni superando líneas contrarias. Si atacás mal, defendés peor. Y así pasó. Goles de Unión (ver jugadas previas en el video) luego de una transición rápida y tomando a la defensa en desventaja posicional.



Otro punto determinante y que se repite siempre porque los rivales de Newell´s se cierran mucho en su campo, es que por momentos no juega con dos líneas en ofensiva: medios y delanteros. Entre mediocampistas ofensivos y atacantes siempre debe existir de 10 a 15 metros de distancia. Por momentos, sobre todo cuando está perdiendo, todos se ubican en una única misma línea. Desesperación por estar en el área. Si hay mucha gente por delante de la línea de la pelota no es posible una buena construcción de la jugada. Y si eso ocurre, existirán menos chances para que el ataque culmine en buenas condiciones potenciando las probabilidades para que el rival te tome mal parado.

No llegar a obtener el campeonato no debe ser una desgracia. Una modesta satisfacción debe permanecer ante este equipo. Ahorre sus frases resultadistas con el diario del lunes y sea parte del estilo propuesto. Nada mejor que ser parte positiva de un estilo que marcará el sello de los próximos años de Newell´s.


(*) Matías Manna (@matiasmanna) es autor del libro Paradigma Guardiola (Ara Llibres), creador del blog que lleva el mismo nombre. Entrenador de fútbol profesional y asesor e integrante de cuerpos técnicos de nivel internacional, nacional y regional. Egresado de la carrera de Posgrado Comunicación Digital Interactiva (Universidad Nacional de Rosario) – Licenciado en Periodismo (UNR). Docente universitario. Gestor de @ParadigmaPep, medio de comunicación rosarino con más seguidores en Twitter