Privilegiar el cuidado de la salud sobre la estética es el mensaje, incluso de quienes venden los veraniegos lentes oscuros. “Hemos detectado un aumento de cataratas directamente proporcional con una capa de ozono que no está filtrando bien y a su vez un deterioro en la capacidad de la gente de protegerse sus ojos”, explicó uno de los especialistas.

Además, explicó la importancia de no adquirir ese producto en cualquier local: “La utilización de anteojos que no están controlados por un técnico óptico o por una empresa con trayectoria puede llegar a traer lesiones muy serias”. Por ejemplo, dijo, los negocios donde se vende ropa, porque allí no están controlados

En cuanto a los criterios de los rosarinos a la hora de adquirir unos anteojos oscuros, una vendedora contó a Canal 3 que mujeres y hombres se acercan en igual cantidad y que, a su vez, tienen un criterio similar en cuanto al estilo. “Los que más se venden con los grandes y los alargaditos”, precisó.