Luego de tres interrupciones, las autoridades de la Universidad Nacional de Rosario decidieron tomar algunos recaudos para poder realizar la nueva reunión del Consejo Superior que, por otra parte, ya tiene fecha: el próximo lunes 4 de diciembre.
En realidad, no se trata de una nueva reunión sino de la continuación del encuentro que debió suspenderse este martes, luego de que un grupo de estudiantes irrumpiera a los gritos y con megáfono en la sede de gobierno de la UNR. La reunión previa también había sido complicada y había debido suspenderse. En ese marco, incluso, dos alumnas denunciaron haber sido heridas ante lo cual se inició sumario administrativo en la UNR para determinar qué fue lo que sucedió.
En conferencia de prensa, el rector interino Aldo Gimbatti confirmó que si bien la reunión de este lunes va a ser abierta no se va a permitir mayor cantidad de personas de la que el salón pueda albergar, motivo por el cual los que no logren ingresar van a poder ver la sesión a través de una pantalla gigante en el salón contiguo.
Al ser consultado sobre lo ocurrido en la última sesión, Gimbatti evaluó: “La violencia no solamente puede ser física. Acá hubo violencia verbal mediante gritos, cantos, el uso de megáfonos y demás. No permitieron que los concejeros se expresaran”, se quejó.
Por otra parte, “el reglamento establece que todas las sesiones deben ser grabadas y no se podía grabar por los gritos. Suficiente razón para levantar la sesión, aunque igual hubo una moción de un consejero en ese sentido que se votó a favor”, aclaró.
En la reunión que está pendiente debe definirse el cronograma de elección de autoridades, ya que Gimbatti asumió su cargo luego del inesperado fallecimiento del rector Ricardo Suárez el pasado 10 de julio.
