Como cuando se pedía a gritos "que se vayan todos", en la provincia de Santa Fe muchos eligieron votar en blanco como la mejor forma para expresar su voluntad. De hecho, se constituyó como la tercera fuerza en las elecciones de este domingo con más del 15 por ciento en todo el territorio.
Ya temprano, desde la ciudad de Santa Fe llegaban los primeros datos que hablaban de una importante presencia del denominado voto bronca, con más del 20 por ciento en esa ciudad capital. Fenómeno que se relacionó en seguida con el efecto indignación por la respuesta que dio el municipio en la segunda inundación que sufrieron los santafesinos en pocos años, y con el hecho de que el actual intendente Martín Balbarrey va por la reelección.
Y esas cifras comenzaron a consolidarse con el correr de la tarde-noche en todo el territorio santafesino. De hecho, el candidato a gobernador Hermes Binner señaló “llamativo del número del voto en blanco” al hablar desde su búnker y calculó incluso que sumaba más votos que la fórmula de Agustín Rossi.
En rigor, escrutadas la mayoría de las mesas, el voto en blanco en toda la provincia era del 15 por ciento, en la ciudad de Santa Fe era del 20 y en Rosario apenas el 11. Mucho más que la fórmula radical Alicia Tate - Juan Carlos Millet, que obtenía tres puntos, o Roxana Latorre, con menos porcentaje aún.