No se debe utilizar las pruebas de olfato para predecir la enfermedad de Alzheimer, la forma más común de demencia, según un estudio reciente.

Aunque hay una relación entre ambas cosas, los investigadores hallaron que otros problemas médicos podrían hacer que las personas pierdan el sentido del olfato, lo que no necesariamente significa que desarrollarán el trastorno cerebral progresivo más adelante.

"Una asociación no específica entre una mala función del olfato y la demencia del Alzheimer no es lo mismo que realmente poder usar una prueba de olfato para predecir el Alzheimer", enfatizó en un comunicado de prensa de la Universidad de Michigan el doctor Gordon Sun, otorrinolaringólogo general de la universidad, en Ann Arbor.

"Desafortunadamente, la mala interpretación de la investigación ha llevado a la promoción de estas pruebas por parte de los medios de comunicación y figuras públicas como el doctor Oz", añadió. "Este estudio ayuda a aclarar el tema sobre el lugar en que se halla la evidencia actual".

Para llevar a cabo la abarcadora revisión, los autores del estudio examinaron casi 1,200 artículos que se remontaban a 1984. Dos estudios que siguieron a los pacientes en el tiempo y 30 estudios que evaluaron a los pacientes en un momento específico cumplieron con los criterios de inclusión.

"Es comprensible que los investigadores, profesionales clínicos y el público estén deseosos de una forma sencilla, precisa y barata de predecir o diagnosticar el Alzheimer temprano, pero aún no lo hemos conseguido", planteó Sun, quien también es experto clínico de la Robert Wood Johnson Foundation y de Asuntos de Veteranos de Estados Unidos en la Facultad de Medicina de la Universidad de Michigan.

"Mi preocupación es que al promover las pruebas de olfato ahora, creemos esperanzas falsas o incluso falsas alarmas entre los adultos mayores y sus familias", señaló. "Se necesita investigación adicional antes de que podamos confiar en que las pruebas de olfato predicen un inicio posterior del Alzheimer".

Fuente: Health Day