En 2007, las compañías Telecom, Telefónica y CTI invertirán más de 3.500 millones de pesos para desarrollar varias novedades, entre las que se encontrarán nuevas tecnologías en redes fijas y celulares, que permitirán a los usuarios navegar en internet con más ancho de banda, ver televisión en los dispositivos móviles, enviar mensajes de texto por líneas fijas y tener varios números telefónicos en una casa con un mismo aparato.

El diario La Nación informa que Telecom anunció una inversión de 1000 millones de pesos para el desarrollo de redes de nueva generación, que reemplazarán a las fijas tradicionales. Esta nueva tecnología permitirá a los clientes residenciales y corporativos acceder a servicios de valor agregado, entre ellos, banda ancha de 20 megas, transmisión de datos, imágenes y sonidos por el mismo canal, mensajería de texto y desvío de llamadas en función de criterios de días y horarios.

La unidad de celulares de Telecom, Personal, recibirá una inversión de 500 millones de pesos para el armado de servicios de tercera generación, que abrirán a los usuarios la posibilidad de navegar a alta velocidad, y acceder a prestaciones multimedia y videollamadas.

Telefónica, en tanto, invertirá 1600 millones de pesos, de los cuales 300 millones servirán para poner en marcha Speedy TV, una señal televisiva que correrá por el cable del proveedor de Internet. El presupuesto para ampliar las prestaciones de la red fija será de 500 millones y el grueso de este monto se destinará al desarrollo de la banda ancha.

Movistar, del grupo Telefónica, recibirá 750 millones de pesos, de los cuales una porción estará dirigida al desarrollo de las redes de servicios de tercera generación.

En CTI consideran que por la penetración de la telefonía móvil y la cantidad de terminales con más de tres años de antigüedad en circulación, este año se renovará el parque de celulares, lo que permitirá la aplicación de nuevos servicios. La empresa del grupo Telmex invertirá 268 millones de dólares en la renovación de infraestructura y el desarrollo de las redes de nueva generación, que comenzarán a funcionar a mediados de 2007.