Hace dos años y tras las uno de los primeros temporales, los estudiosos del tema ya pronosticaban fenómenos cada vez más fuertes. En aquel momento, el investigador meteorológico Oscar Monjelat, anticipó la posibilidad de crecientes vientos intensos y aseguró que esas condiciones “se van a repetir e intensificar porque todavía no estamos en el período de mayor calentamiento”. También señaló omisiones del Estado para prevenir. Dos años después el panorama sigue empeorando, tanto por la naturaleza como por la falta de políticas efectivas en cuestiones de prevención.

De una manera que parece estar tornándose cíclica, tormentas de intensidad nunca antes vistas se presentan en meses como febrero-marzo, octubre-noviembre. Desde el 2005, una o dos veces por año feroces meteoros hacen escala en Rosario y zona.

A nivel mundial la cosa no es mejor. Terremotos, tsunamis, tornados, huracanes, inundaciones, sequías, nevadas excepcionales, granizo de tamaño atípico, olas de calor, olas de frío, tormentas eléctricas de duración muy prolongada, son noticias cada vez más frecuentes.

En este escenario, la población en general se halla en un estado de incertidumbre ante estos fenómenos y el calentamiento global y el denominado efecto invernadero se ponen una vez más en primera plana.

Satélites, alertas tempranas y hasta el comportamiento de los animales, son parte del abanico preventivo con el que se cuenta. Sin embargo el corto plazo en el que se desatan algunos meteoros, son hasta ahora la principal causa de colapsos en el ámbito urbano, donde los planes de contingencia parecen ser insuficientes.

Pero los fenómenos no son nuevos y en distintos lugares del planeta tormentas con las características de las ocurridas en la región (y peores), son parte de la condición de la naturaleza.


Las tormentas alrededor del mundo


Los signos del cambio climático ya son tangibles y los peores pronósticos parecen tomar fuerza cuando se hace un racconto de lo ocurrido en los últimos años. Tornados, tsunamis, huracanes y sequías, alguna de las características de un panorama cambiante.

Como nunca antes, desde la red de redes va recopilando uno a uno los sucesos ocurridos. Youtube, Flickr, blogs y redes sociales, son desde hace tiempo los nuevoes escenarios donde compartir información y dar a conocer lo que sucede en cada rincón del mundo.

Uno de los fenómenos más recordados a nivel mundial fue el tsunami ocurrido el 26 de diciembre de 2004, con epicentro en la costa del oeste de Sumatra, Indonesia. Un maremoto ocasionó una serie de tsunamis devastadores a lo largo de las costas de la mayoría de los países que bordean el Océano Índico, matando a una gran cantidad de personas a su paso e inundando a una gran cantidad de comunidades costeras a través de casi todo el sur y sureste de Asia. Ese fin de año, el canal de videos on line explotó con material casero de los veraneantes.