El actor irlandés Liam Neeson acudió a su primer evento con "alfombra roja" desde que se quedó viudo hace cinco meses, pero evitó responder preguntas de tipo personal

Neeson, cuya esposa, la actriz Natasha Richardson, falleció en marzo pasado a causa de un accidente de esquí, acudió el martes por la noche al hotel Tribeca Grand de Nueva York, donde se proyectó la película Five Minutes of Heaven, del alemán Olivier Hirschbiegel, en la que él tiene uno de los papeles principales.

El actor irlandés se detuvo y conversó con los periodistas reunidos en la alfombra roja, a los que se les pidió que no se le preguntara nada sobre su situación personal. De esta forma, Neeson, de 57 años y con dos hijos, volvió a la vida pública en la ciudad donde conoció, se casó y vivió con Richardson la mayor parte del tiempo.

La actriz británica, de 45 años y ganadora de un premio Tony por su interpretación de Sally Bowles en la versión teatral de Cabaret, sufrió el pasado marzo una caída mientras recibía unas clases de esquí en la estación Mont Tremblant, en Canadá.

La actriz de origen británico se dio un fuerte golpe en la cabeza y, aunque en un principio pareció haber quedado ilesa, horas más tarde comenzó a sufrir un fuerte dolor de cabeza y dos días más tarde murió de un derrame cerebral en un hospital de Nueva York.

Desde entonces el actor irlandés, famoso por su participación en películas como La Lista de Schindler, se ha dejado ver poco en público y no había asistido hasta ahora a ningún evento con "alfombra roja".

La última película en la que actúa Neeson está basada en hechos reales y se estrenará en Estados Unidos el 21 de agosto. La película, de Olivier Hirschbiegel, director de La caída sobre los últimos días de Adolf Hitler en su búnker berlinés, cuenta una historia sobre el terrorismo y la reconciliación en Irlanda del Norte.

En el festival Sundance de Nueva York ganó el premio al Mejor Director y Mejor Guionista en la sección World Cinema.

Fuente: EFE