La expulsión del Ejército del capitán Augusto Pinochet Molina por pronunciar un discurso político no autorizado durante las exequias de su abuelo, el ex dictador Augusto Pinochet, "es otra persecución política del gobierno", dijo Marco Antonio Pinochet, hijo menor del ex jefe militar.

"La persecución ha estado presente cuando han presionado a los Tribunales de Justicia para que nos persigan. Persiguieron a mi padre, persiguieron a mi madre, ahora siguen persiguiendo a mi madre, a toda su familia. Bueno, y ahora presionan al Ejército para que persiga a mi sobrino", declaró Pinochet hijo.

Pinochet Molina, nieto del ex dictador fallecido el domingo, fue expulsado del Ejército luego que defendió el golpe de Estado de 1973, criticó a la Justicia y formuló juicios políticos en las exequias de su abuelo.

El general Oscar Izurieta explicó que "como comandante en jefe del Ejército, tenía absoluta claridad que (Pinochet Molina) había cometido una gravísima falta a la disciplina, que le había producido un grave daño al Ejército y que, por lo tanto, no había otro camino que cursarle la baja".

Según Marco Antonio Pinochet la expulsión de su sobrino "ha sido una reacción exagerada" que se debe "indudablemente" a que "lleva el mismo nombre que mi padre y es militar".

"El Ejército tomó una decisión apresurada, probablemente producto de esta tremenda presión que ha recibido del gobierno" de Michelle Bachelet, agregó.