Los astronautas del trasbordador espacial “Discovery” iniciaron este sábado una nueva caminata fuera de la Estación Espacial Internacional para concluir el cableado eléctrico que la dejará lista para la colocación de nuevas extensiones.
La tercera y última caminata espacial programada para la actual misión de 12 días del trasbordador comenzó a las 14.25 y fue realizada por el veterano astronauta Robert Curbeam y por la nueva navegante espacial, Sunita Williams.
Sin embargo, funcionarios de la Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) evalúan la posibilidad de una cuarta caminata para arreglar un panel solar que presenta problemas a fin de hacer espacio para la colocación de un nuevo de mayor utilidad.
Tras diversos intentos por resolver el problema del panel solar de 33 metros de largo desde la Tierra, los directores de la misión en Houston, Texas, se dieron por vencidos y evalúan la eventual realización de una cuarta caminata para arreglar el desperfecto, según pubilcó Milenio.
De fallar el intento, la NASA considera enviar el lunes a otro par de astronautas del Discovery para una cuarta caminata a fin de arreglar el problema con el panel solar. De realizarse, el desprendimiento del Discovery de la Estación Especial Internacional se retrasaría hasta el martes.
También se analiza la posibilidad de que la tripulación que reside en la Estación Espacial pueda resolver el problema durante una futura caminata luego del desprendimiento y regreso del Discovery a la Tierra.
El trabajo de arreglar el panel solar podría forzar a los astronautas el saltarse una inspección final del escudo protector térmico de la nave antes de que el trasbordador regrese a Tierra. La NASA ha sido muy meticulosa con la supervisión de la coraza térmica de los transbordadores, desde la pérdida del Columbia en el 2003 a causa de un hoyo en la estructura protectora.
Sin embargo, los jefes de la misión no están preocupados de que el Discovery pudiera haber sido dañado durante el despegue como le ocurrió al Columbia. El trasbordador no cuenta con suficiente abastecimiento más allá del 23 de diciembre y la NASA se reserva siempre dos días para posibles retrasos por problemas de clima.