Las nueces, almendras, anacardos, pistachos, macadamias, avellanas y piñones se asocian con una mejor salud del corazón. Comer más frutos secos, sobre todo nueces, puede reducir el riesgo de una enfermedad cardiovascular en personas con diabetes tipo 2.

Este tipo de diabetes tiene que ver con altos riesgos de colesterol elevado, enfermedades cardíacas y posibilidad de sufrir un ACV, pero hasta ahora se había estudiado poco acerca de los beneficios que pueden traer los frutos secos al respecto.

En este trabajo, publicado por la Asociación Americana del Corazón, y reproducido por 20 Minutos, los autores utilizaron cuestionarios sobre la dieta de 16.217 hombres y mujeres antes y después de que les diagnosticaron diabetes tipo 2, donde les preguntaron acerca de su consumo de frutos secos y de árbol

En el tiempo que duró el estudio, hubo 3.336 casos de enfermedad cardiovascular (incluidos 2.567 casos de enfermedad coronaria y 789 casos de accidente cerebrovascular) y 5.682 muertes (1.663 muertes por enfermedad cardiovascular y 1.297 muertes por cáncer).

Cruzaron los casos con las respuestas obtenidas y encontraron que incluso aquellos que comían una pequeña cantidad de frutos secos tenían beneficios para el corazón, relación que era más fuerte con los frutos de árbol.

Para mayor precisión, los científicos lo midieron y hallaron que las personas con diabetes tipo 2 que ingerían cinco porciones de frutos secos por semana tenía un 17% menos de riesgo de incidencia de enfermedad cardiovascular total, un 20% menos de riesgo de enfermedad coronaria, un 34% menos de riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular, y un 31% de menos de riesgo de mortalidad por todas las causas.