Anna Nicole Smith escribía sus vivencias en diarios íntimos que, luego de su muerte, se muestran como puertas hacia su turbulento mundo interior. Son dos libros en los que la ex conejita de Playboy, a principios de los 90, aseguraba estar profundamente enamorada del octogenario magnate petrolero J. Howard Marshall II, a la vez que se revelaba frecuentemente deprimida y preocupada por su peso y hábitos alimentarios.
Los diarios de la estrella, obtenidos en exclusiva por The Associated Press serán subastados con otros objetos personales dentro de unas semanas por las Heritage Auction Galleries de Dallas. La subastadora obtuvo los diarios de un empresario alemán anónimo que los compró a través de internet por medio millón de dólares hace varias semanas y que ya se aseguró los derechos de publicación de los diarios y después decidió venderlos. Las posturas comenzarán con 20.000 dólares, y Noewine prevé que se venderán por unos 100.000 dólares.
El mundo privado de Anna Nicole
“He estado muy estresada últimamente y deprimida y no puedo dejar de comer. Me siento como un cerdo", escribió el 16 de agosto de 1992 la ex conejita de Playboy que murió el 8 de febrero de una sobredosis de drogas en un hotel de la Florida.
Uno de los diarios está escrito en un cuaderno y tiene un mensaje manuscrito en la carátula interior: "Este diario pertenece a Vickie Smith. ¡No leer!". Smith, cuyo nombre verdadero era Vickie Lynn Smith, relata el comienzo de su relación con Paul Marciano, presidente de Guess Inc., donde reemplazó a Claudia Schiffer en la publicidad de esa marca de jean.
"¡¡¡Dios mío!!! Paul Marsiano llamó hoy para saber si recibí sus libros también me voy a San Antonio a una sesión de fotos", escribió el 23 de junio de 1992. "¡¡Estoy tan emocionada!! No lo puedo creer. Puede ser mi día de suerte", decía. La anotación finaliza con cinco caritas sonrientes dibujadas a mano.
Dos días después escribe sobre una visita a la tienda Nieman Marcus donde compró ropa por valor de 3.000 dólares. "Me encanta que luzcan tan bien", escribió. "Espero que impresione a Paul Marsiano... Tengo hambre!! Estoy comiendo muy poco", anotaba.
Para agosto, Smith expresaba su malestar con respecto a la comida y el sexo, y su desencanto creciente con Marshall, 63 años mayor que ella, con quien se casó 1994.
"Muy estresada últimamente y deprimida y no puedo dejar de comer. Me siento como un cerdo. Howard me ha comprado algunas joyas pero me llama 15 o 20 veces por día y me vuelve loca. Lo amo pero a veces me enfada", escribió. "No sé qué hacer con Paul, un tipo extraño. Detesto que los hombres quieran sexo todo el tiempo", indicaba.
El 13 de junio escribió que había bebido demasiado y se quedó en casa a mirar una película, y agregó que "me tomé un Zandrex!"
Según el reporte de la autopsia, Smith murió a los 39 años debido a una sobredosis accidental de por lo menos nueve medicinas de venta bajo receta, entre ellas un potente somnífero, y que no fue víctima de un delito.
La muerte de Marshall, según Smith
El segundo diario es un calendario Guess Kids de 1994. Las anotaciones no llevan fecha, pero describen su relación con Marshall, que estaba enfermo y murió en 1995.
"Es tan débil y frágil. Cuando lo toco tengo miedo que se rompa", escribió. "Si Jesús decide llevárselo no sé lo que haré. Lo amo tanto y me duele tanto mirarlo cuando sufre solo quiero abrazarlo tocarlo y decirle cuánto lo quiero", escribió.
Los diarios de la estrella, obtenidos en exclusiva por The Associated Press serán subastados con otros objetos personales dentro de unas semanas por las Heritage Auction Galleries de Dallas. La subastadora obtuvo los diarios de un empresario alemán anónimo que los compró a través de internet por medio millón de dólares hace varias semanas y que ya se aseguró los derechos de publicación de los diarios y después decidió venderlos. Las posturas comenzarán con 20.000 dólares, y Noewine prevé que se venderán por unos 100.000 dólares.
El mundo privado de Anna Nicole
“He estado muy estresada últimamente y deprimida y no puedo dejar de comer. Me siento como un cerdo", escribió el 16 de agosto de 1992 la ex conejita de Playboy que murió el 8 de febrero de una sobredosis de drogas en un hotel de la Florida.
Uno de los diarios está escrito en un cuaderno y tiene un mensaje manuscrito en la carátula interior: "Este diario pertenece a Vickie Smith. ¡No leer!". Smith, cuyo nombre verdadero era Vickie Lynn Smith, relata el comienzo de su relación con Paul Marciano, presidente de Guess Inc., donde reemplazó a Claudia Schiffer en la publicidad de esa marca de jean.
"¡¡¡Dios mío!!! Paul Marsiano llamó hoy para saber si recibí sus libros también me voy a San Antonio a una sesión de fotos", escribió el 23 de junio de 1992. "¡¡Estoy tan emocionada!! No lo puedo creer. Puede ser mi día de suerte", decía. La anotación finaliza con cinco caritas sonrientes dibujadas a mano.
Dos días después escribe sobre una visita a la tienda Nieman Marcus donde compró ropa por valor de 3.000 dólares. "Me encanta que luzcan tan bien", escribió. "Espero que impresione a Paul Marsiano... Tengo hambre!! Estoy comiendo muy poco", anotaba.
Para agosto, Smith expresaba su malestar con respecto a la comida y el sexo, y su desencanto creciente con Marshall, 63 años mayor que ella, con quien se casó 1994.
"Muy estresada últimamente y deprimida y no puedo dejar de comer. Me siento como un cerdo. Howard me ha comprado algunas joyas pero me llama 15 o 20 veces por día y me vuelve loca. Lo amo pero a veces me enfada", escribió. "No sé qué hacer con Paul, un tipo extraño. Detesto que los hombres quieran sexo todo el tiempo", indicaba.
El 13 de junio escribió que había bebido demasiado y se quedó en casa a mirar una película, y agregó que "me tomé un Zandrex!"
Según el reporte de la autopsia, Smith murió a los 39 años debido a una sobredosis accidental de por lo menos nueve medicinas de venta bajo receta, entre ellas un potente somnífero, y que no fue víctima de un delito.
La muerte de Marshall, según Smith
El segundo diario es un calendario Guess Kids de 1994. Las anotaciones no llevan fecha, pero describen su relación con Marshall, que estaba enfermo y murió en 1995.
"Es tan débil y frágil. Cuando lo toco tengo miedo que se rompa", escribió. "Si Jesús decide llevárselo no sé lo que haré. Lo amo tanto y me duele tanto mirarlo cuando sufre solo quiero abrazarlo tocarlo y decirle cuánto lo quiero", escribió.