El ex gobernador y presidente de la Cámara de Diputados provincial, Antonio Bonfatti, deslizó que el presidente Mauricio Macri está "acostumbrado" a negociar votos en el Congreso con gobernadores a cambio de la condonación de deudas con la administración nacional y que sus críticas a Santa Fe obedecen a que Miguel Lifschitz no juega ese juego . Además, agregó que la provincia, durante la gestión anterior y en la actual, busca recibir el pago por fondos coparticipables que dictaminó la Justicia a fines del año pasado.
En diálogo con el programa A Diario (Radio 2) que conduce Alberto Lotuf, el presidente del Partido Socialista manifestó que el jefe del Estado "está acostumbrado a disciplinar a los gobernadores a cambio de algo". "¿Por qué a las provincias mineras les perdona deudas por 3.500 millones de dólares y a Santa Fe, que reclama lo que le corresponde, no le presenta un plan para pagarle", agregó.
"Después de siete meses, es hora de que el presidente dé una respuesta. No pedimos que el dinero venga contante y sonante, se puede negociar, pero para eso hay que tener voluntad y hacer una oferta. La provincia reclama los millones del fallo de la Corte Suprema; no es más de lo que se nos retaceó durante años", expresó el diputado provincial.
Bonfatti consideró que a Macri le "molestó" que desde el gobierno santafesino se hayan expresado posturas contrarias a las políticas nacionales. "Nadie está inventando que existió un tarifazo en el país, una merma en la actividad industrial y comercial y pérdida de puestos de trabajo. Parece que decir eso molesta", amplió.
"Ya padecimos estas discriminaciones. No es correcto no respetar la expresión popular, que eligió a un gobernador. Se debe trabajar con la provincia, no hay que denostrar a las personas. Hemos marcado diferencias y coincidencias; he remarcado la voluntad de diálogo del gobierno nacional y que dan marcha atrás cuando se equivocan, aunque eso también sea una debilidad", añadió el presidente del Partido Socialista.
Por último, el ex gobernador dijo que las declaraciones del mandatario no están en sintonía con las expresadas por él durante el acto por el Bicentenario de la patria, en el que pidió "dejar de lados los enfrentamientos".
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