El presidente Mauricio Macri mantuvo este viernes un contacto telefónico con su par de Estados Unidos, Donald Trump, a quien le expresó la preocupación del gobierno argentino sobre la decisión de la Casa Blanca de aplicar aranceles a las importaciones de acero y aluminio.

Durante el diálogo, Macri le expresó a Trump su preocupación por el potencial efecto negativo de esas medidas sobre la economía argentina, en tanto que el presidente estadounidense se comprometió a evaluar un pedido para que la Argentina sea exceptuada de cualquier medida restrictiva que afecte las exportaciones de acero y aluminio hacia los Estados Unidos, añadió un comunicado de la Presidencia.

Ambos mandatarios también conversaron sobre la Cumbre de las Américas que se hará en Lima en abril próximo, y sobre la situación financiera del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Según lo anunciado por Trump, Estados Unidos decidió establecer un sobre arancel a las importaciones de aluminio del 10%, y otro de acero con una tasa del 25%, en una medida basada en la defensa de la industria local y la seguridad nacional.

Recordó la Cancillería que los países que podrían ser exceptuados en esta instancia serían Canadá y México, aunque Trump afirmó que pueden ser más los que cuenten con ese privilegio, a través de un procedimiento que será anunciado en breve. 

Entre estos argumentos, se destacó la baja participación que tienen las ventas nacionales en el mercado norteamericano, ya que las exportaciones argentinas representan sólo 0,6% del acero y 2,3% del aluminio de todas las importaciones que hace Estados Unidos en ambos rubros, "y por lo tanto Argentina no es causante ni contribuye a las distorsiones que afectan a los mercados mundiales".