La empresa alemana Mahle envió telegramas de despido a los 139 empleados de la planta de Rosario que no habían aceptado el retiro voluntario con indemnización. De esa forma redondeó su retirada de la ciudad y ahora los obreros sólo esperan que se concrete el traspado a un nuevo empresario que los reincorpore. 

Según confirmó el delegado de los trabajadores Claudio Maldonado, la firma tomó es actitud desde principios de este mes y las comunicaciones fueron llegando al resto de los obreros de la planta que dejó de producir hace cinco meses.

Mahle justificó su decisión en que el 70 por ciento del personal (eran más de 450 antes de concretarse el cierre) aceptó la indemnización por lo que entendió ya no debía hacerse cargo de los salarios del resto y formalmente terminó el vínculo.

“Nosotros rechazamos los despidos y pedimos mantener el puesto laboral”, aseguró Maldonado en diálogo con Rosario3.com. En principio, la Nación se comprometió a que los trabajadores mantendrían el lugar con el ingreso de una nueva firma, que sería Aros Kim.

El empresario de Buenos Aires titular de esa firma, Jorge Basualdo, se reunirá este miércoles con la ministra de la Producción Débora Giorgi. Según Maldonado, Aros Kim “tiene prioridad” y estaría “en un 80 por ciento concretado el traspaso”. Los trabajadores realizarán casi en paralelo una asamblea para analizar la continuidad del plan de lucha.