Al menos 15 personas murieron en Irak, entre ellas el director de un canal de televisión, y 40 cadáveres mas fueron encontrados en las últimas 24 horas, con lo que asciende a 150 el número de cuerpos sin vida hallados desde el lunes.

En el suceso más sangriento, un grupo de hombres armados asaltó un edificio de una televisión vía satélite, recientemente inaugurada, y mató a siete de sus trabajadores, entre ellos el director del canal y tres agentes de seguridad.

Un grupo de pistoleros, vestidos con el uniforme de la policía especial del Ministerio de Interior, llegó a la sede del canal Al Shabiya, situado en el barrio de Al Zaiyona, en el este de la capital, a bordo de vehículos todoterreno, alrededor de las 07.30 hora local (04.30 GMT).

Una vez allí, dispararon contra los agentes de seguridad del canal y mataron a tres de ellos.

Inmediatamente después, los asaltantes irrumpieron en el edificio y se dirigieron a las oficinas donde mataron a otros cuatro trabajadores del canal, entre ellos su director, identificado por las fuentes como Abdelrrahman.

En el enfrentamiento otros tres guardias resultaron heridos.

Hoy también, al menos cinco personas murieron y otras diez resultaron heridas, cuatro de ellas policías, en un doble atentado cometido contra una patrulla de la policía en el centro de Bagdad.

Según relató a EFE el oficial Ali Hadi, un artefacto estalló al paso de un vehículo de las fuerzas del orden cuando circulaba por la calle que une la plaza Teherán con la de Al Jalani, en el centro de la capital.

La fuente comentó que en el momento de la detonación había una abundante circulación.

Minutos después, cuando varias unidades de policía habían llegado al lugar de los hechos explotó un coche-bomba que estaba aparcado en las proximidades.

Además, otros dos iraquíes murieron y ocho resultaron heridos por el estallido de una moto-bomba al paso de otra patrulla de la policía, en el barrio Al Qahira, en el norte de Bagdad.

En Mosul, un grupo de desconocidos mató a un antiguo oficial de las fuerzas aéreas iraquíes, el coronel suní Sabhi Mahmud al Mashadani, enfrente de su casa.

Asimismo, en las últimas 24 horas la policía iraquí halló 40 nuevos cadáveres en distintas partes de Bagdad, con lo que asciende a 150 el número de cuerpos sin vida encontrados desde el lunes.

Según aseguraron a Efe fuentes del Ministerio de Interior, los cuerpos, como suele ser habitual, tenían señales de haber sido torturados, estaban maniatados y presentaban impactos de bala en la cabeza.

Irak vive inmerso en una espiral de violencia sectaria que se ha cobrado la vida de miles de personas, sin que los repetidos planes de seguridad, el estado de emergencia y los toques de queda impuestos continuamente por las autoridades hayan conseguido apaciguar.

El detonante de esta ola de secuestros, torturas y asesinatos interconfesionales fue un atentado cometido el pasado 22 de febrero contra un templo chií en Samarra, a 120 kilómetros al norte de Bagdad.

Por otra parte, el ejército estadounidense anunció hoy la muerte de un soldado estadounidense ayer en un ataque de la insurgencia ocurrido en Kirkuk, a 250 kilómetros al norte de Bagdad.

Según un comunicado oficial, el ataque, en el que también resultaron heridos otros dos uniformados norteamericanos, se produjo mientras los militares participaban en una "operación de seguridad".

Fuente: Efe