La fiesta de la cerveza de Munich, la Oktoberfest comenzó este sábado con cerca de medio millón de personas dispuestas a vaciar los primeros barriles del más preciado bien de Baviera. La celebración, inaugurada por el alcalde muniqués Christian Ude, que jarra en mano brindó por una Oktoberfest en paz y concordia, durará en esta 173 edición dieciocho días, dos más de lo habitual.

Los organizadores esperan que sólo este fin de semana se den una vuelta por el recinto ferial un millón de personas y que al concluir la feria el número de visitantes supere los seis millones del 2005.

En esta edición participan 650 fabricantes de cerveza y firmas gastronómicas, puestos de comida y bebida que estarán atendidos por unos 10 mil camareros, cocineros y ayudantes.

El precio de la cerveza, como en años anteriores, varía en función del tipo pero en general aumentó un 3,7 por ciento respecto de la edición precedente.

Según la organización, el litro de cerveza costará este año, como máximo, 7,50 euros.

Fuente: EFE