Desde España se confirma un dato que todos los fanáticos de Internet ya sospechaban: el 70 por ciento de los usuarios de la web mienten en el momento de definir su perfil en los portales de contactos online. De este porcentaje, la mayor parte son mujeres, quienes aseguran que las patas cortas no le han dado resultados.
En tanto, las consultoras de la Argentina dieron fe del dato a partir de la práctica, a pesar de que en el país no hay estadísticas.
La empresa española Samsara, que ofrece contactos para formar “una pareja estable”, tuvo acceso a los resultados de un estudio que les debe haber hecho pensar en bajar la persiana: por más que ellos ofrecen “seguridad”, resulta que buscar pareja en la Web es bastante "inseguro".
"El riesgo de desembocar en un desengaño por juego sucio es alto", dice el estudio del portal El Planazo, que analizó el testimonio de casi 8.000 personas. "Al momento de definir su perfil en los sitios de contactos, el 70 por ciento de los usuarios falta a la verdad", revela. Y las mujeres no sólo resultaron más mentirosas que los varones, sino que confesaron tener poco éxito: apenas el 2 por ciento admite haber llegado a encontrar lo que buscaba.
Aunque en la Argentina no hay estudios sobre el tema, los que recurren a este servicio y los que lo ofrecen, coinciden con los resultados de la encuesta española: "Es exactamente de lo que se quejan nuestros clientes, que llegan acá como último recurso, en general tras repetidas frustraciones en búsquedas en la web. Lo que me cuentan es que quienes buscan contactos online quieren anonimato y cero compromiso. Pocos llegan al encuentro y casi nadie termina armando una pareja", dice Margarita Baumann, al frente de For-Ever, una de las "consultoras de vínculos" más antiguas del mercado consultada por Clarín.
Mónica Píccoli, fundadora de otra conocida agencia de contactos, coincidió con Baumann: "Recibimos mucha gente que ha tenido experiencias muy feas, que ha sido lastimada y engañada. Quienes optan por los encuentros online en general inventan mucho, fantasean para seducir a ese otro que desconocen. Es riesgoso si uno pone expectativas de algo serio", advierte.
El psicoanalista Enrique Novelli ofrece a Clarín un análisis posible de la conducta del mentiroso on-line: "Quien miente «se miente». Miente para esconder los rasgos que considera poco valiosos y destaca los que siente que no posee y desea tener. En consecuencia, el mentir respecto de la personalidad es la expresión de un deseo muy íntimo que la persona siente imposible satisfacer. Al crear la «ilusión en el otro» sostiene la esperanza de que el reconocimiento le vendrá desde quien se ilusionó con su fantasía. Es, entonces, la expresión del sentimiento de baja autoestima".
Por su parte, Adriana Arias, psicóloga y sexóloga especialista en erótica, sostiene que el anonimato que ofrece la web afloja resistencias y habilita permisos: "Parte de esto influye en la tendencia a mentir. Profundiza la seguridad interna de anonimato y permite desearnos imaginariamente de múltiples formas que puedan expandir nuestra propia aprobación".