Natascha Kampusch, la joven austríaca secuestrada durante ocho años en un sótano cerca de Viena y cuya historia conmocionó hace dos meses al mundo, rechazó rotundamente las informaciones que indicaban que su secuestrador produjo películas sadomasoquistas con ella. "Esto de las películas y las fotos no es cierto. Lo puedo descartar de forma definitiva", aseguró.

Sobre las versiones de que la historia de su secuestro no es cierta, Natascha contestó diciendo que "algunos teóricos de la conspiración también dicen que Elvis (Presley) sigue vivo".

A pesar de su aparente aversión a la prensa, la joven reconoció que un día le gustaría ser "periodista o escritora". además, la joven señaló que desea quedarse con la casa de su secuestrador "para evitar que se convierta en un especie de santuario, donde se puedan comprar ceniceros y tazas de café". En todo caso, dice no saber aún qué hará con la casa en caso de recibirla, lo más probable es que deje vivir allí a la madre de su secuestrador, a la que aún no ha conocido personalmente, asegura. "Eso me lo guardo para el momento indicado", manifiesta.

Además, Natascha criticó a los periodistas españoles que intentaron entrevistarla hace dos semanas y que se enfrentaron de forma violenta con su padre. "El equipo español de televisión nos asaltó a mí y a mi familia. Y eso que les habíamos dejado bien claro que no íbamos a contestar a ninguna pregunta", señaló Natascha en una entrevista concedida a dos diarios vieneses en sus ediciones de mañana.

"Pero yo no me enteré del enfrentamiento, porque ya me había alejado", aseguró la joven de 18 años, secuestrada en 1998 a los diez años de edad y que sólo logró escaparse en agosto pasado. Agregó que el episodio vivido con los periodistas españoles fue la peor experiencia vivida en la vía pública desde que se escapó de su cautiverio hace siete semanas.

Un cámara del programa "El buscador de historias", que emite Telecinco los sábados, se enfrentó el pasado 28 de septiembre al padre de Natascha durante el intento de entrevistar a la joven en el casco histórico de Viena.
El camarógrafo se había desplazado a Austria, junto con dos compañeros para realizar un reportaje sobre las últimas noticias aparecidas en medios internacionales relacionadas con el caso de Natascha.

Fuente: EFE