La situación del guardameta paraguayo Diego Barreto no es de las más sencillas: el arquero entrena con el plantel de Newell´s desde que acordó de palabra su contrato con el presidente Eduardo López, aunque se sabía de antemano que podría haber complicaciones. Es que Barreto aun no tenía resuelto un conflicto con Valladolid de España, provocado por su determinación de pasar a Almería de ese mismo país sin respetar el vínculo existente, y ahora el club dueño de su pase le pone trabas a su pase al rojinegro.
“Sí, se quedó trabado el asunto en España”, dijo el golero en diálogo con la prensa a la salida del entrenamiento de este lunes. “Estamos hablando todos los días con Pedro (Aldave), mi representante, para ver cómo se destraba. Tenemos que esperar la respuesta desde allá, que se está haciendo esperar demasiado” señaló el guaraní, visiblemente preocupado por un escenario que luce complicado.
Pero no solo esta complicación es lo que turbó el ánimo de Barreto. Además, lo que era una segura partida de Justo Villar a algún otro equipo del país o el exterior ahora no lo es tanto, por lo que la permanencia del ídolo leproso junto al arribo de Marcos Gutiérrez conformaron una verdadera superpoblación de arqueros de jerarquía. Esto no haría más que enturbiarle a Barreto sus posibilidades de transformarse en titular, algo que era casi una condición inaplazable para el que traspaso se rubricara.
Por lo pronto, al paraguayo solo le resta esperar: “Estoy preocupado, porque uno viene trabajando bien, viene mentalizándose para llegar de la mejor manera al inicio del torneo… pero bueno, esto ya me ocurrió, ya tengo la cabeza dura… ahora solo me queda aguardar”. Lo que sí aseguró Barreto es que a estas horas ya será imposible que pueda ser habilitado a tiempo para las dos primeras fechas del Apertura.
El arquero paraguayo analizó su situación
