El equipo de Nueva Zelanda no tuvo inconvenientes en derrotar hoy a su par de Venezuela por 100-70, en el partido que definió el tercer puesto del denominado Super 4 de básquetbol, que se disputa en el gimnasio del club Unión de Santa Fe y que es preparatorio para el comienzo del Mundial de la disciplina que se desarrollará en Japón, desde el próximo 19 de agosto.

 

El conjunto neocelandés, que anoche perdió ajustadamente con Brasil, fue amplio dominador, a partir de la efectividad de Craig Bradshaw, responsable de 22 tantos.

 

Además, Nueva Zelanda contó con la sobria conducción de Mark Dickel (fue titular durante 23 minutos) y el apoyo del escolta Kirk Penney, como para justificar el éxito de un equipo que supo clasificarse cuarto en la última Copa del Mundo jugada en Indianápolis 2002.

 

Por el otro lado, Venezuela sintió demasiado las ausencias del lesionado Héctor Romero (sufrió una luxación del codo izquierdo en el choque de anoche ante Argentina) y de Oscar Torres, quien ni siquiera entró en el rectángulo de juego.