La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló hoy que la salud de los habitantes en los países más pobres pueden sufrir en mayor medida los efectos del cambio climático como inundaciones y olas de calor.
El coordinador del Departamento de Medio Ambiente y Salud Pública de la OMS, Carlos Corvalán, declaró a la agencia de noticias Efe que en Asia muchas de las áreas más empobrecidas tienen una ubicación geográfica que se verá más afectada por los cambios del clima y que sus infraestructuras en el medio rural y las ciudades están menos preparadas.
"Las inundaciones en urbes con una canalización deficiente pueden generar focos de agua estancada, donde proliferen los mosquitos que son portadores de enfermedades como el dengue o la malaria", indicó Corvalán, que asiste al segundo "Seminario sobre Cambio Climático y Salud en los Países del Sudeste y el Este Asiático" organizado por la OMS en la capital malasia del 2 y al 5 de julio.
El experto explicó que las sequías pueden provocar una migración masiva a las ciudades que saturarían el sistema sanitario y las olas de calor podrían extender el hábitat de los mosquitos portadores del virus de la malaria que acarrearían un aumento de infecciones.
Por otro lado, las olas de calor causan numerosas muertes directas tal como demuestran los 70.000 fallecimientos que produjo la que azotó Europa en 2003, recordó Corvalán, quien afirmó que ahora los países toman conciencia de que el calentamiento global no sólo afecta a la agricultura o la economía, sino sobre todo, a la salud.
La OMS ha advertido del desbordamiento de los lagos en Nepal a causa del deshielo de los glaciares del Himalaya, la proliferación de la malaria en Bután o Papúa Nueva Guinea o de un incremento de inundaciones en India.
Mañana concluye este seminario en el que responsables de salud de 17 países, como China, Camboya, India, Japón, Malasia o Paquistán se han dado cita para debatir y apuntar estrategias para prevenir los efectos del cambio climático en la salud de sus ciudadanos.
El director regional para Asia-Pacífico de la OMS, Shigeru Omi, indicó que Malasia y los países del Sudeste Asiático deben sopesar el desarrollo económico y la conservación del medio ambiente.
En su opinión, los ciudadanos son conscientes de los asuntos medioambientales, pero desafortunadamente están más preocupados en el desarrollo económico. "Si siguen enfocados exclusivamente en el beneficio económico, la tierra sufrirá", sentenció Omi.