No sólo los vidrieros se hicieron su noviembre tras la tormenta. También en los comercios donde se cortan y venden chapas y revesitimientos la demanda era enorme, debido a los daños que produjo la pedrea del miércoles. Mientras tanto, el fiscal de Cámaras José María Peña odenó abrir una investigación para determinar si incurrieron en el delito de "usura" los negocios de venta de parabrisas y lunetas que en algunos casos hasta duplicaron sus precios aprovechándose de la urgencia de los automovilistas a los que se les rompieron los vidrios.

Colas y más colas se podían ver en todos estos locales, donde se agolpaban vecinos de zonas afectadas que querían reparar lo más rápido sus techos destruidos en el caso de los que buscaban chapas.

Un comerciante del ramo contó, en un informe que se pudo ver en De 12 a 14, que le demanda se multiplicó por ocho. Nomalmente tenemos entre 50 y 60 pedidos de particulares, hoy estamos en los 400 por día.

Peña, en tanto, dijo en De 12 a 14 que los comerciantes que aumentan desmedidamente sus precios "aprovechándose de la necesidad de las personas" estarían infringiendo el artículo 165 el Código Penal y que por eso amerita la apertura de una causa judicial.

Por su parte, Fernando Leva, de la asocición civil La Comuna, dijo que se registraron aumentos de hasta el 120 por ciento e insitó a los automovilistas a no comprar a esos precios.