Más de un millón y medio de personas participaron este sábado en una multitudinaria marcha que convirtió a Madrid en la capital mundial del orgullo gay, con un desfile bajo el lema "¡Ahora Europa, la igualdad es posible" y las banderas del arco iris como estandarte.

Según los organizadores de la marcha del Europride 2007, que se celebró por primera vez en España, el desfile fue seguido por más de un millón y medio de personas.

La ministra española de Cultura, Carmen Calvo, acompañada por los dirigentes de los dos principales sindicatos del país, la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez, y el de Comisiones Obreras (CCOO), José María Fidalgo, abrieron el desfile tras la pancarta de cabecera.

Más de 40 espectaculares carrozas animaron la marcha al son de la música y en la que abundaron los disfraces más atrevidos y también los más tradicionales de bomberos, marineros, colegialas, policías, legionarios, las clásicas drag queens y hasta de teletubbies.

Pero, la tradición española se dejo sentir también con el sombrero cordobés y los trajes de volantes de sevillana en versión minifalda.

Lesbianas, homosexuales, bisexuales y transexuales llegados de todo el mundo compartieron la fiesta con heterosexuales, familias con niños, jóvenes y mayores, que se dieron cita en el corazón de la ciudad para saludar el espectáculo.

El ambiente festivo no hizo olvidar las reivindicaciones de este colectivo, que las expuso en el manifiesto leído al final de la marcha.

El mensaje principal fue que desde que se celebró la primera manifestación del Orgullo gay, hace 30 años en la ciudad española de Barcelona, se ha logrado un "reconocimiento social y legal" que entonces parecía "casi imposible", pero, pese a los avances legales y sociales, "queda mucho por hacer" contra la discriminación y la homofobia.

Además se recordó que en países como Afganistán, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Irán, Mauritania, Nigeria, Sudán y Yemen, las relaciones homosexuales se castigan con la pena de muerte y que, dentro de Europa, el Gobierno "conservador, retrógrado, arcaico y atrasado" de Polonia persigue "sin disimulos" a estas personas.

Hubo una mención especial a los homosexuales y transexuales de Latinoamérica, con los que "tenemos que seguir estrechando los lazos".

"La solidaridad internacional entre las distintas sociedades es la única forma de desterrar la violencia homófoba", resalta el manifiesto.

La fiesta que comenzó en la noche del pasado miércoles, se prolongará hasta mañana domingo, con el "barrio rosa" de Chueca como escenario principal y por el que se calcula que pasarán más de 2,5 millones de visitantes.

Fuente: EFE