Leonardo Astrada, técnico de River, no permitió que Ariel Ortega entrenara este lunes con sus compañeros y es un misterio si el Burrito continuará o no jugando profesionalmente.

El Burrito se presentó en el Monumental para practicar, pero Astrada y su ayudante de campo, Hernán Díaz, su ayudante de campo, lo llamaron aparte y estuvieron reunidos durante más de dos horas.

Según trascendió, Ortega les contó que estaba mejor y le pidió al entrenador volver al equipo, pero Astrada le pidió que retomara el tratamiento por sus problemas con el alcohol y le dijo que no podía dejarlo volver a practicar con el resto del plantel como si nada hubiera pasado.

El viernes a la noche Ortega se reunió con Astrada, Díaz y Matías Almeyda, uno de los referentes del grupo junto con el propio Ortega y Marcelo Gallardo. Allí el Burrito le pidió al técnico que no lo tuviera en cuenta para jugar con Lanús porque no estaba bien anímicamente y que lo dejara retirarse de la concentración. Astrada accedió al pedido del jugador y River terminó con una derrota ante Lanús en el Monumental.

Ortega reconoció que estaba pensando en dejar el fútbol. "Por ahí no sigo", fueron las palabras que eligió el sábado para explicar su situación. Pero este lunes su actitud era otra.

Sin embargo, Astrada teme por otra recaída y quiere que el jugador se maneje con mayor previsibilidad.