A horas de asumir en su cargo, el nuevo jefe de la policía rosarina, Oscar Barei, ya comenzó a delinear algunos patrones de lo que será su gestión a la cabeza de la Unidad Regional II. En declaraciones a Radio 2, Barei manifestó que la intención es "iniciar una gestión de puertas abiertas".  "Vamos a recibir a la gente, escuchar su reclamo, para poder trabajar en los problemas diarios de los vecinos", expresó el policía.

Barei, de 50 años, fue confirmado este lunes por la tarde como el nuevo jefe de Policía de Rosario, en lugar de Osvaldo Toledo, que se hizo cargo de la fuerza a nivel provincial. Y asume en ese cargo este martes al mediodía.

El ex titular de la Unidad Regional X –con epicentro en Cañada de Gómez– asumirá en la Jefatura local y estará secundado por Marcelo Casajús, hasta aquí al frente de Orden Público en la ciudad. Barei es oriundo de la zona sur de Rosario, divorciado y con dos hijos, se radicó hace varios años en la localidad de Las Rosas donde se desempeñó en diferentes mandos de la fuerza.

"Voy a hacer lo mismo que hice en la ciudad de Cañada de Gómez. Hay que lograr que la gente tenga confianza en su propia policía", expresó. 

En tanto, consultado acerca de la inseguridad el nuevo jefe de la policía manifestó: "Creo que hay que evaluar muchas cosas, hay que trabajar en mayor prevención. Hay que volver a la figura del policía que camina la ciudad, que se vea al personal policial caminando en todos los barrios no solo en algunos sectores".