A priori, todo lo que pasa en Estados Unidos es culpa del terrorismo. Pero es difícil que puedan achacarle a Bin Laden la última plaga que amenaza a Nueva York: las ratas. Varios restaurantes fueron clausurados por este motivo en las últimas semanas, varios pertenecientes a importantes cadenas de comida rápida, que se suman a los casi 500 restaurantes multados en los últimos dos años.

El panorama no es bueno: según los especialistas, en la ciudad podría haber más roedores que neoyorkinos.

La cadena Kentucky Fried Chicken, propietaria además de la franquicia Taco Bell, debió cerrar varios de sus locales en el Bajo Manhattan. La cadena de comida rápida contrató ahora a un experto de control de plagas para acabar con los roedores.

Un vídeo disponible en YouTube muestra como los roedores corretean a sus anchas por un restaurante de la cadena y comen de los restos de la comida. Llamativamente, el video se filmó un día después de que pasara por allí una inspección de sanidad: el material provocó el cierre del establecimiento y el lógico despido del inspector.

Lejos de ser un incidente aislado, la situación de los restaurantes confirma la gravedad del problema que tiene Nueva York con los roedores. Según expertos, el problema se agudiza cuando los más populosos barrios de la ciudad obligan a los restaurantes a almacenar dentro la basura hasta la hora de la recogida.