La inflación de febrero fue del 0,3%. Al menos, ese es el índice que dio a conocer el Intistuto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), que marca una baja considerable respecto de enero. El número del gobierno fue inferior al primer mes del año porque, según se explicó, tiene que ver con la disminución en gastos en turismo y la estabilidad en el precio de las prepagas.

En el momento en que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos daba a conocer la cifra oficial de precios al consumidor de febrero, los trabajadores del organismo estatal realizaron una movilización por lo que consideran una "intervención" del Gobierno.

Los técnicos y empleados del organismo denuncian una "manipulación" oficial tras el desplazamiento de dos funcionarias Graciela Bevacqua, ex directora de Índices de Precios, y Clyde Charre de Trabucchi, ex directora de Estadísticas de Condiciones de Vida.

Por ese motivo, un centenar de trabajadores se concentraron en la puerta del Ministerio de Economía desde el mediodía de este lunes, reclamando que el dato que se daría a conocer en horas de la tarde sea "un índice en serio". La mayor parte de los trabajadores del Indec que protestaron frente al Palacio de Hacienda, están nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).

El viernes pasado, la ex directora del área de Precios, Graciela Bevacqua, cuyo desplazamiento desató el conflicto, se presentó a declarar ante el Fiscal Nacional de Investigaciones Administrativas, Manuel Garrido. Bevacqua fue remplazada por Beatriz Paglieri, una funcionaria con varios años de carrera en el Ministerio de Economía cercana al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

Una semana antes, había sido el turno de Clyde Charre de Trabuchi, jefa de Bevacqua en el organismo, quien también había dejado su cargo como directora nacional de Estadísticas de Condiciones de Vida.

Tras el desplazamiento de las funcionarias, debutó en enero la nueva metodología que utiliza el Indec para medir los precios. Por un lado, ahora se toman los datos de los precios oficiales, es decir aquellos que están siendo auditados por el Estado. Así, se sustituyeron los precios del mercado por los precios vigilados.