El jefe del Parque Provincial Aconcagua, Pablo Perelló, informó este viernes de la muerte de un andinista inglés que se aprestaba a hacer cumbre en el Aconcagua, debido a un paro cardíaco o por muerte súbita, con lo que suman cuatro los escaladores muertos en menos de una semana.

El deceso de Michael Freeman fue avisado al puesto de Plaza de Mulas a las 16.30 de esa provincia, por el guía chileno Sebastián Rosende, que lo acompañaba en su ascenso, dijo a Télam Perelló. 

Su muerte se suma a los dos andinistas -un guía argentino y un montañista italiano- que perdieron la vida el jueves y el caso de un alemán días atrás, con lo que suman cuatro los escaladores muertos en menos de una semana.

Los tres italianos se recuperan

Los dos andinistas italianos que fueron rescatados este viernes del cerro Aconcagua permanecían internados en la Unidad Coronaria del Hospital Italiano de Mendoza, en estado "estable", mientras un tercer compañero de igual nacionalidad estaba "compensado" e iba a ser internado en un hospital de esta ciudad, informaron fuentes médicas.

Marco Afasio, de 39 años, "pasó por sala de Terapia Intensiva y ahora está estable en la Unidad Coronaria", al igual que su compañera Marina Acanazio, de 38, quien también esta "estable" en la misma sala, dijo esta tarde a Télam una fuente del hospital.

Desde el campamento Plaza de Mulas, en el cerro Aconcagua, se informó que el italiano Mateo Refrigerato, de 35 años, fue trasladado esta tarde desde el refugio Nido de Cóndores, a 6.300 metros de altura, hasta Horcones, en la base del cerro, e iba en ambulancia hacia un centro asistencial.

Sobre Refrigerato, el oficial de la Policía de Mendoza Antonio Ibaceta comentó que "fue evacuado en helicóptero hasta Horcones, y de ahí va camino a un hospital en ambulancia".

Ibaceta añadió que, igual que sus otros dos compañeros, "sufrió congelamiento de extremidades en segundo y tercer grado, segundo grado de hipotermia, agotamiento extremo y deshidratación".

"Sufre de quemadura de segundo y tercer grado y deshidratación pero está compensado y, a mi criterio, fuera de peligro", dijo el policía, quien añadió que ahora queda "en manos de los profesionales médicos, que tendrán que evaluar el congelamiento".

La expedición trunca

Afasio, Acanazio y Refrigerato se extraviaron el martes último casi en la cima del Aconcagua junto a la montañista italiana Elena Zenil, de 38 años, quien murió el miércoles, y el guía mendocino Federico Campanini, de 31, quien fue rescatado anoche y falleció esta madrugada luego de sufrir una gran descompensación.

"Estaba muy descompensado, no pudimos hacer nada. Entró en un período de descompensación muy grave y agotamiento. Sufría un edema pulmonar y un principio de hipotermia que se fueron encadenando", aseguró Ibaceta, uno de los responsables de la patrulla de rescate.

Los cinco debieron soportar condiciones climáticas adversas, con nieve, viento y temperaturas cercanas a los 20 grados bajo cero.

Los dos cadáveres "serán rescatados en los próximos cuatro a cinco días, ya que es una operación que se debe realizar por tierra porque es imposible que a esa altura opere el helicóptero", afirmó el policía.

El oficial añadió que el cadáver del guía está a unos 6.300 metros de altura y el de la andinista mucho más abajo, dentro de un barranco.

Las tareas de rescate comenzaron el miércoles, tras una llamada vía satelital que hizo el guía fallecido, y se demoraron por la dificultad del terreno y el clima.

Ibaceta manifestó que los montañistas "estaban preparados" para afrontar la travesía, ya que "habían salido como sale todo andinista, por la ruta normal hacia la cumbre".

"Los dificultó el temporal que les hizo perder visibilidad y el camino para el descenso", expresó, y admitió que la operación de rescate "ha sido bastante complicada, teniendo en cuenta que las condiciones climáticas no nos favorecieron para nada".