El empresario ruso Andréi Lugovói, una de las últimas personas en reunirse con el ex agente Alexander Litvinenko antes de que éste fuera envenenado una sustancia radiactiva, también resultó afectado por la radiación.

La nueva víctima se suma Dimitri Kovtun, otro ex KGB, quien se había reunido con Litvinenko en Londres, el mismo día en que el ruso cayó enfermo. Kovtun ahora parece correr la misma suerte. Está en coma en un hospital de Moscú. Otro envenenado fue Mario Scaramella, un italiano que también cenó con el espía ruso.

"A Lugovói se le ha diagnosticado una alteración de las funciones de varios órganos debido a la radiación", señalaron fuentes médicas de la clínica de Moscú donde se encuentra ingresado a la agencia Interfax. Sin embargo, Lugovói se encuentra "mucho mejor que Dmitri Kovtun", agregó la fuente.

Kovtun, se encuentra consciente, "Se le ha diagnosticado una forma aguda de contaminación radiactiva interna con nucleidos que irradian radiación alfa que afecta a órganos vitales: hígado, riñón e intestino", informaron los médicos que le tratan. Ambos presentan síntomas similares a los detectados en el organismo de Litvinenko, que murió envenenado el pasado 23 de noviembre por una dosis de polonio 210, un isótopo radiactivo altamente tóxico.

Supuestamente, Lugovói y Kovtun se reunieron con Litvinenko en el hotel Millenium de Londres el pasado primero de noviembre, justo el día en que este último fue ingresado con síntomas de envenenamiento. Pero además Lugovói se reunió hasta en cuatro ocasiones con Litvinenko en Londres.

Hay muchos sospechosos del envenenamiento pero ninguna certeza. El Kremlin, los propios servicios de inteligencia y los ricos rusos, están en la mira de las investigaciones.