Calor, mucho calor. El calor interno de quienes ganaron la elección y de quienes tras dejar su voto en las urnas fueron a hacer el aguante se sumó a la primaveral temperatura del domingo electoral para convertir el Patio de la Madera en un verdadero sauna socialista. Pero a nadie parecía importarle, incluso los más serios y austeros dentro del partido se animaron esta vez a sonreír de oreja a oreja. Y no era para menos.

En realidad, los primeros festejos que hicieron levantar temperatura no fueron de los socialistas. Jóvenes universitarios, militantes del PC y seguidores del ARI fueron algunos de los que se arriesgaron con cantitos y saltos poco después de las 18, cuando nadie se animaba a decir oficialmente los números que, presumían, los iban a llevar a la victoria.

El primer gran estruendo llegó incluso antes de que los ganadores confirmaran su triunfo en el escenario. Ocurrió cuando la multitud se enteró de que Rafael Bielsa había reconocido públicamente la derrota. Serpentinas al aire, manos alzadas y el ruido de algunos bombos coronaron lo que, a esa altura, era un secreto a voces. En un hecho inédito para el país, Binner asumiría como el primer gobernador socialista.

Pero el estruendo fue aún mayor, si es que eso era posible, cuando por una puerta lateral apareció el intendente Lifschitz seguido de Binner y varias reconocidas figuras del Frente Cívico y Social. Revoleo de remeras al mejor estilo Soledad, votos triturados tirados al aire y enérgicos cantitos antiperonistas fueron los protagonistas del momento.

Incluso después de los discursos la gente continuó festejando, esta vez al ritmo de la cumbia que salía de los parlantes. Es que, tras dos elecciones en las que se esperaba festejar pero no se había podido, todos se habían preparado para una larga, pero muy larga espera. Algunos asumían que volverían de madrugada a sus casas sin saber el nombre del nuevo gobernador. Pero todo se resolvió temprano. Así que si algo no faltaba era adrenalina. Y para derrochar el resto de energía que los fans del Frente Cívico y Social tenían en reserva la gente salió a la calle a festejar.