Venezuela manifestó este viernes su "admiración a la respuesta transparente y digna de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner", con respecto a la acusación del gobierno estadounidense por el caso Wilson, y ratificó su solidaridad para "seguir juntos construyendo la unión de nuestros pueblos".
Según un comunicado emitido por la cancillería venezolana, "a poco de haberse iniciado una nueva operación política del gobierno de los Estados Unidos en contra de la República Bolivariana de Venezuela y la Argentina, se comprueba la participación vulgar y descarada de agentes policiales y judiciales estadounidenses en una peligrosa maniobra contra dirigentes legítimos".
"Al analizar las declaraciones de los agentes policiales y judiciales del imperio, y compararlas con las de funcionarios y legisladores afectos al actual gobierno norteamericano, queda en evidencia cómo se intenta articular una desesperada acción política y judicial para frenar el avance de nuevos liderazgos soberanos, independientes y dignos en América Latina y el Caribe", prosigue el comunicado.
También, el texto publicado en la página del ministerio de Poder Popular para Relaciones Exteriores de Venezuela indica que "Buenos Aires fue testigo de la fundación del Banco del Sur, iniciativa de trascendencia histórica que le permitirá a nuestros Pueblos construir un poder financiero autónomo y justo para garantizar las inversiones que requiere el desarrollo económico con justicia social e igualdad".
Esta realidad "acaba con décadas de imposiciones neoliberales que, a través del Fondo Monetario Internacional, entre otros, destrozaron la estructura económica y la vida social de nuestros países", agrega.
Y continúa: "Este paso gigantesco dado en Argentina, fue posible gracias al triunfo democrático y legítimo de nuevos liderazgos que han rescatado en términos concretos el legado de unión, libertad e igualdad, de nuestros libertadores".
"Sin embargo, los avances de los pueblos del Sur no son tolerados por la elite que gobierna los Estados Unidos de América, que ha pretendido de mil maneras, a través del sabotaje económico, golpes de Estado, campañas de guerra psicológica y mediáticas; revertir la corriente natural de nuestra historia contemporánea", advierte.
Finalmente, la República Bolivariana de Venezuela ratifica su repudio "a esta maniobra que el gobierno estadounidense pretende esconder bajo la supuesta independencia del poder judicial y policial.
"Por brutal que sea, esta campaña política y mediática no logrará detener el proceso de consolidación de los nuevos liderazgos democráticos del continente".
