El anuncio de la provincia de un aumento de sueldos del 12 por ciento para sus empleados en 2007 y un piso salarial de mil pesos generó críticas inmediatas por parte de los gremios. Si bien la versión oficial indica que la suba está dos puntos arriba de la inflación prevista en el presupuesto santafesino e incluso se encuentra por encima en cinco más de lo que tiene estipulado el gobierno nacional, desde UPCN señalaron que se trata de una propuesta "ridícula" e insistieron en que no aceptarán cifras menores a 1800 pesos. La propuesta fue rechazada también por los médicos nucleados en Amra.

Consultado por Radio 2, el ministro Coordinador de la provincia, Rubén Michlig aseguró que “a partir de ese valor de mejoramiento del salario real, acordaremos cada gremio las particularidades de la política salarial de cada sector”. En este sentido, el funcionario manifestó que "se continuará discutiendo la eliminación de los conceptos no remunerativos de los salarios".

Michlig reconoció que el Ejecutivo es optimista en cuanto al recibimiento que tendrán de este ofrecimiento, sin embargo admitió que quizás sea imposible satisfacer por completo el reclamo del gremio de los empleados públicos UPCN. “Estamos lejos de poder complacer todos los pedidos, pero el diálogo siempre seguirá abierto como hasta ahora", concluyó.

Otra fue la postura de Alberto Maguid, secretario general de UPCN, gremio mayoritario en la provincia, para quien el anuncio "cayó como una pesada piedra". El dirigente sostuvo que se trata de una propuesta “injusta” y que se decidió en forma “unilateral”.

Maguid recordó que la ley 10.052 obliga al gobierno a discutir en paritarias temas salariales. "Íbamos a sentarnos a discutir la política salarial en febrero, pero nos condiciona que ellos tengan una pretensión del 12 por ciento de aumento", lamentó. "El 12 por ciento no es suficiente en ningún sentido. Más cuando el gobierno provincial tiene una situación financiera óptima y una perspectiva para 2007 de buena recaudación. Nosotros insistimos con 1800 pesos que venimos planteando", sostuvo.

Ante la importante brecha entre las pretensiones del gremio y la propuesta oficial, "no hay posibilidad de partir por la mitad, como se hace en una discusión", evaluó. "Las perpectivas son de conflicto", sostuvo, y no descartó la posibilidad de realizar un paro.

En la misma línea, los profesionales de la salud nucleados en la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra) también cuestionaron el anuncio. En contacto con Radio 2, Ricardo Alegretti, secretario general de la entidad, señaló que no les cayó bien la propuesta del gobierno. “De ninguna manera alcanza, y por eso vamos a esperar que los grandes gremios vayan a paritarias para poder elevar nosotros nuestro pedido”, indicó.

Alegretti sostuvo que “el reclamo que elevemos va a contemplar características propias del trabajo de los profesionales de la salud, creemos que la eficiencia del servicio público esta garantizada por los recursos humanos y eso habrá que reconocerlo”. Aunque no quiso arriesgar números, señaló que “van a trabajar para jerarquizar la variable actual que ubica el pago de la hora de trabajo en los 14 pesos y el salario básico en los 200 pesos”.