El secretario de Gobierno municipal, Horacio Ghirardi anunció que “en quince días se hará una primera reunión para hablar de estos temas. Ahí se hará una agenda de reuniones para ir conversando estas cuestiones”. Las declaraciones fueron hechas por el funcionario este martes por Radio 2, tras la reunión que tuvo lugar este lunes entre intendentes y jefes comunales y la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe (Festram) en la que representó a la Municipalidad de Rosario.

Sin la generación de recursos desde el ámbito provincial para los municipios no se puede hablar de aumentos salariales. Esa fue la principal idea que consensuaron este lunes. Por su parte, el gremio comprendió, luego de que intendentes y jefes comunales expusieran sus números, que la situación es complicada y que para avanzar en futuras negociaciones, primero hay que hacerlo en cuestiones que dependen de la Legislatura provincial.

Según señalaron asistentes al encuentro –que duró más de cinco horas en el Consejo de Ciencias Económicas de la ciudad de Santa Fe–, no se habló por ahora de cifras ni porcentajes de eventuales incrementos en los sueldos.

En este sentido, Ghirardi observó: “Hay que buscar nuevas formas de financiamiento para los municipios y comunas y no comenzar con subas salariales desproporcionadas” y agregó en tono de gravedad: “Hay que encarar la tarea en conjunto, muchas comunas piensan que en febrero o en marzo declaran la cesación de pagos y la imposibilidad de enfrentar los sueldos y hay que prestar atención porque ésta no es sólo la situación de las pequeñas comunas sino también de grandes municipios, como Santa Fe o Rosario donde tenemos serias dificultades”.

Mientras tanto, todo parece quedar atado a lo que pase en la Legislatura santafesina con tres temas: la ley de presupuesto, una modificación en tributos para generar más recursos para las localidades provinciales y el planteo de un nuevo esquema de coparticipación, con el mismo fin. Dos proyectos de ley sobre estos temas naufragaron el año pasado por falta de desacuerdos entre el socialismo y el PJ.

El gremio de los trabajadores municipales habría aceptado que no es posible que haya empresas que no paguen ingresos brutos, mientras que también puso sobre la mesa la necesidad de rever el impuesto inmobiliario, un tributo que se coparticipa en un 55 por ciento.

“Fue una buena reunión, positiva y despojada de chicanas políticas”, resumió el funcionario este martes. “Las comunas y municipios están desfinanciados y complicados mientras que el estado nacional genera impuestos que no son coparticipalbles. Hay una distorsión en la forma de administración de los recursos públicos en la Argentina”, finalizó.