Este miércoles, en la plaza San Martín, los trabajadores de la salud autoconvocados (nucleados en ATE) se mostraron enojados con las autoridades municipales y provinciales. No hubo acuerdo: ni los municipales lograron un acercamiento con el secretario de Salud, Miguel Capiello, con quien se reunieron más temprano, ni los provinciales aceptaron como condicionante el aumento otorgado por el gobernador Jorge Obeid a los médicos jefes de servicio y a los médicos de guardia.

En el marco del segundo día de paro, los trabajadores de la salud marcharon hasta la sede de la Gobernación “ante la falta de respuestas a sus reclamos de recomposición salarial”. Allí se congregaron y expresaron sus respectivas posturas ante un conflicto que parece no resolverse en lo inmediato.

Los empleados que se desempeñan bajo la órbita provincial, hicieron saber su rechazo al aumento de 250 y 200 pesos a médicos jefes de servicio y de guardia, respectivamente, como bandera blanca en este conflicto. “No nos llega a todos sino a un sector determinado y no resuelve nuestros reclamos”, se hizo oír una de las profesionales. En tanto, este jueves a las diez, en el Hospital Provincial, los empleados provinciales analizarán cuáles serán sus próximos pasos.

Por su parte, los trabajadores municipales se expresaron por medio de su representante, Lucía De Vincentis: “Le dimos hasta el viernes a Capiello para que nos presente, por lo menos un aumento escalonado”, dijo a Radio 2. Según relató, el secretario de Salud les comunicó que había hablado con el intendente pero que éste le había manifestado que el municipio no contaba con fondos para incrementar los salarios de la esfera sanitaria.

Mientras, los efectos del paro de los profesionales se siente con fuerza en los hospitales municipales y provinciales, las partes vuelven a mostrarse intransigentes y lejos de un acuerdo. En este marco, este martes, el intendente Miguel Lifschitz advirtió a los médicos autoconvocados que "es muy delicado dejar sin salud, con una medida de este tipo que es simultánea en la provincia y la Municipalidad, a la población más necesitada".

El jefe comunal dijo que quienes impulsan la medida de fuerza "deberían reflexionar, pensar que vivimos en sociedad con muchas inequidades; no hay que mirar sólo el ombligo de uno sino el conjunto".

Los reclamos de los empleados de la salud municipal hacen eje en un sueldo de bolsillo de 2.500 pesos, en la incorporación al básico de los incrementos y adicionales obtenidos, además exigen que estas recomposiciones salariales sean extendidas a los enfermeros, trabajadores sociales y técnicos.

Por su parte, los trabajadores provinciales piden un sueldo de 2.500 pesos para los médicos que cumplan las 24 horas semanales y un salario de 2.400 pesos para los no profesionales que completen las 30 horas semanales. También reclaman el pase a planta permanente de los trabajadores