El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia condenó a prisión perpetua a Emilio Del Real, Luis Sosa y Carlos Marandino como "coautores responsables del homicidio con alevosía" de la llamada Masacre de Trelew, perpetrada en 1972, durante la dictadura de Alejandro Agustín Lanusse. Fueron absueltos los ex capitanes de navío Jorge Bautista y Rubén Paccagnini.

Los hechos se produjeron el 22 de agosto de dicho año, cuando se fusilaron a 19 prisioneros políticos en la base Almirante Zar de la capital de Chubut.

La Justicia se pronunció en una sala colmada por familiares y compañeros de los fusilados, junto a veteranos militantes chubutenses de la solidaridad con los presos políticos, entre otro público.

La causa elevada a juicio en abril de 2009 acumuló una extensa plataforma probatoria sobre los hechos de la Masacre de Trelew que, argumentaron los acusadores, marcó hace 40 años un hito en el plan clandestino de represión y fue el “ensayo general del terrorismo de Estado” llevado a su máxima expresión durante la última dictadura.

Las defensas de los acusados, que convergieron en negar la lesa humanidad de los delitos juzgados, enmarcaron su inscripción en un plan sistemático de terrorismo de Estado para pedir la prescripción y en algunos casos la amnistía de sus defendidos.

La secuencia de hechos que derivó en los fusilamientos comenzó el 15 de agosto de 1972, cuando presos políticos pertenecientes a las organizaciones guerrilleras FAR, ERP y Montoneros se fugaron de la cárcel de Rawson, en Chubut.

Sólo seis de los evadidos pudieron llegar a tiempo al viejo aeropuerto de Trelew para completar la huida en avión a Chile, según lo habían planeado: Mario Roberto Santucho, Marcos Osatinsky, Fernando Vaca Narvaja, Roberto Quieto, Enrique Gorriarán Merlo y Domingo Menna.

Otros 19 presos fugados del penal, cercados en el aeropuerto por militares, pactaron -en presencia de un juez y periodistas- su rendición con garantías, que no se cumplieron, y una semana después fueron fusilados en la base Zar, en la madrugada del 22 de agosto de 1972.

Según lo constató ya el acta de elevación a juicio, el 22 a la madrugada, “aproximadamente entre las 2.30 y 3.30”, Sosa, Bravo, Del Real y un cuarto oficial ya fallecido, de apellido Herrera, “se presentaron en el lugar de detención”, el área de calabozos que se hallaba en el edificio de acceso a la base Zar y donde en ese momento hacía guardia Marandino.

Los marinos ordenaron “a los detenidos que doblaran sus mantas y sacaran los colchones para que los dejaran en el extremo del pasillo por donde se ingresaba a dicho sector, luego de lo cual se los hizo formar en fila en el pasillo”, instantes antes de abrir fuego contra los 19 prisioneros.

Como consecuencia de la lluvia de disparos o rematados con “tiros de gracia” fallecieron ese día Rubén Pedro Bonet, Jorge Alejandro Ulla, Humberto Segundo Suárez, José Ricardo Mena, Humberto Adrián Toschi, Miguel Angel Polti, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos Del Rey, Eduardo Campello, Clarisa Rosa Lea Place, Ana María Villarreal de Santucho, Carlos Heriberto Astudillo, Alfredo Elías Kohon, María Angélica Sabelli, Mariano Pujadas y Susana Lesgart.

Alberto Camps, María Antonia Berger y Ricardo Haidar sobrevivieron y relataron la masacre, pero después fueron asesinados o desaparecidos durante la última dictadura, igual que numerosos familiares de los fusilados en Trelew y chubutenses de la Comisión de de Solidaridad con los presos políticos de la Unidad 6 de Rawson.