A pesar de que la Municipalidad fue a la Justicia y denunció este jueves a la mañana a los responsables de los piquetes, varios cortes en demanda de asistencia por las consecuencias del temporal continuaban por la tarde en la ciudad y distintos puntos del cordón industrial.

Al mediodía se sumó una movilización de vecinos y productores ladrilleros de Nuevo Alberdi al centro municipal del distrito norte Villa Hortensia en demanda de ayuda. Según dijeron a Rosario3.com, la decisión se tomó tras la suspensión de una reunión por parte de personal de Promoción Social. Más tarde acordaron realizar un relevamiento en conjunto para definir las necesidades y levantaron la protesta.

En el Distrito Oeste, la situación era similar pero con corte de calle incluido, sobre Seguí y Felipé Moré. La protesta era realizada por mujeres de Vía Honda, damnificadas también por las lluvias y vientos intensos del domingo pasado. "No nos moveremos hasta que tengamos una respuesta", dijo una de ellas a Radio 2. 

Otros dos piquetes se mantenían sobre calle Baigorria, debajo del puente de Circunvalación, y unos 300 metros al oeste, en el inicio la ruta 34 (también por vecinos de Nuevo Alberdi, en zona norte).

Se levantó el corte sobre Circunvalación, por lo que esa vía estaba liberada, al igual que los accesos a la autopista a Santa Fe y a Buenos Aires. También se levantó el piquete en Sorrento y Provincias Unidas.

"Identificar responsables"

Cuatro días después de la lluvia torrencial, las piedras y el viento huracanado, persistían algunos focos de tensión por las consecuencias de la gran tormenta y la Municipalidad decidió hacer presentaciones judiciales, tanto en los Tribunales provinciales como en los federales, para desalojar los piquetes.

Por su parte, el secretario de Gobierno municipal, Fernando Asegurado, dijo al programa La primera de la tarde (Radio 2) que se denunció a “los piquetes que teníamos a la mañana” porque “pasadas 72 horas del evento meteorológico entendemos que han sido atendidos o estamos trabajando para hacerlo, los lugares donde hubo más daño”.

En ese sentido, recordó que los “cortes complican la asistencia” y detalló que la presentación se hizo ante la justicia provincial y federal, según la jurisdicción donde se produce el piquete.

Asegurado dijo que en el Juzgado federal ya había actuaciones de oficio por comunicaciones que realizó Gendarmería y reconoció que pidieron a la Justicia “identificar personas para hacerlos responsables de hechos que pudieran ocurrir”. “Entendemos que debe haber responsables”, dijo.

El cordón, complicado

En el cordón industrial, en tanto, se mantenían los piquetes en la ruta 9 en Correa, en la ruta 11, en los kilómetros 319/332, en Granadero Baigorria y Capitan Bermudez. También persistía la manifestación vecinal en la ruta 11, en el puente de San Lorenzo.

La ministra de Desarrollo Social de la provincia, que estimó que en total 1.500 familias fueron afectadas, sostuvo en diálogo con el programa A diario, de Radio 2, que los piquetes en muchos casos impidieron el paso de cuadrillas de empresas de servicios públicos y de las de asistencia, por lo cual se pidió a las organizaciones que promueven esa metodología que levanten las protestas.

El intendente interino de Granadero Baigorria, Mario Rosales, en tanto, se quejó de que uno de los problemas son los barrios que quedan sin luz y el piquete impidió el paso de la cuadrilla de la EPE que iba a resolver los problemas. "Los agredieron y los operarios se tuvieron que retirar", afirmó. Por eso, este jueves el gerente de la empresa de energía pidió custodia policial.

Además, también en diálogo con A diario, dijo que se trataba de recolectar la gran cantidad de basura acumulada, ante el temor de que con una nueva tormenta se tapen las bocas de tormenta.

Cómo ayudar

Los interesados pueden acercarse a la sede de Cáritas sobre Balcarce al 1000. También juntaban elementos la Universidad Nacional local junto a la red Rosario Solidaria, en Corrientes e Ituzaingó.

En ambos lugares se recibían alimentos no perecederos, muebles –sobre todo camas–, colchones y ropa, entre otros objetos que pueden ser de utilidad para las familias afectadas.