Pintadas amarillas estropearon el trabajo que diseñadores y artistas amigos de Fabricio Simeoni hicieron a fines de noviembre, para recordar al querido filósofo, escritor y periodista rosarino que falleció el 14 de octubre. Hace una semana, el esténcil que dejaba atrás el viejo nombre del pasaje Zabala ubicado por Mitre entre Catamarca y Tucumán y lo rebautizaba “Poeta Fabricio Simeoni”, ya no se puede leer.

Según describió el periodista Fernando Carrafiello del móvil de Radio 2, la figura de un hombre en silla de ruedas con un arma en la mano, con la consigna “La poesía es un arma”, quedó arruinada. Con pintura, manos anónimas tacharon el nuevo nombre del pasaje.

Uno de los empleados del bar de la esquina, Jekyll and Hyde, indicó que hace aproximadamente una semana que la señalética nueva está ilegible por el manchón amarillo.

El cambio de nombre de esa calle céntrica, donde se encuentran algunos bares y restaurantes clásicos de la ciudad, fue una propuesta que lanzó el ex secretario de Cultura de la provincia Jorge Llonch, potenciaron otros amigos de Fabricio y fue aprobada finalmente por unanimidad por el Concejo Municipal.

La iniciativa había acumulado tres mil firmas en diez días, un tiempo récord para un proyecto del tipo en la ciudad.