Polémica en la vecina localidad de Granadero Baigorria por el futuro del Boating ubicado en avenida Lisandro de la Torre y la costanera norte. Hace unas semanas se restituyó el predio al municipio y a partir de ahora los propietarios de las embarcaciones deberán retirarlas del lugar. Los usuarios reclaman que hay personal policial en la zona y que no tienen libre ingreso para sacar sus pertenencias.

La Municipalidad de Granadero Baigorria informó que conforme al cumplimiento de la ordenanza Nº 3825/07, que estableció la nulidad de la adjudicación del Boating a una empresa que prestaba el servicio náutico, se clausuró y se tomó posesión del predio "por irregularidad del proceso licitatorio".

Desde el municipio explicaron que a partir de enero de 2008 "se venía reclamando la restitución del terreno que había sido usurpado, sin tener respuesta alguna por parte de la empresa".

Es así que el accionar del municipio se fundamentó en un dictamen de la asesoría letrada de la Secretaría de Regiones, Municipios y Comunas de la provincia de Santa Fe, que estableció que "se declara nulo el proceso licitatorio por no respetar los procedimientos previstos en la Ley 2756, y que es procedente el desalojo".

"De esta manera, el municipio pone fin a una situación contraria a los intereses de la ciudad, ya que a lo previamente descripto, ha de sumarse el incumplimiento por parte de la empresa del pago del canon correspondiente a lo que legalmente se había comprometido, y el severo perjuicio al vecino de impedirle el libre acceso a la costa", explicaron desde la Municipalidad. 

Tras no efectivizarse la disposición del Ejecutivo local de desocupar el predio, dentro de sus facultades jurídicas y dando cumplimiento a las ordenanzas vigentes, el municipio procedió a realizar un operativo que derivó en la recuperación del predio y la clausura de la actividad comercial que se desarrollaba.

"La iniciativa responde a una firme decisión del Ejecutivo municipal de avanzar en recuperar los espacios públicos de los vecinos de la ciudad conforme a las normativas vigentes y defendiendo el derecho de los vecinos de usufructuar libremente, y sin restricciones, los bienes públicos de la ciudad, sin que éste se vea cercenado por particulares que operan en contra de los intereses comunes", abundaron.

Pero la medida del municipio generó controversias tanto en los propietarios de las 120 embarcaciones que aún están alojadas en el Boating como en los empleados del lugar que ven peligran su puesto de trabajo.

"Legalmente es discutible lo que puede pasar de ahora en más, pero más que nada me llama la atención cómo fue manejado todo este asunto por parte del intendente y demás autoridades, teniendo en cuenta los puestos laborales de los trabajadores", lamentó Miguel, empleado de la empresa.

En tanto, los dueños de las embarcaciones también pusieron el grito en el cielo con la medida del Ejecutivo y son muchos los que denunciaron que "tienen prohibido el paso, no pueden ni revisar sus pertenencias, ni acercarse a su embarcación que lógicamente es propiedad privada".

"Hay un policía en la entrada que no deja pasar y es mentira que liberan las embarcaciones en el transcurso de 10 diaz. Todavía no se liberó ninguna y eso que llevaban todas las documentaciones que pedían, pero no pasó nada", expresó el propietario de una lancha.