Un novedoso análisis de sangre que permite la detección temprana del síndrome de Down en fetos ya está disponible en más de 70 clínicas y consultorios médicos de Alemania, Austria, Liechtenstein y Suiza, según informó su fabricante, el laboratorio LifeCodexx.

El test, cuya salida al mercado genera una inmediata polémica en esos países de Europa, puede ser utilizado por todas las mujeres embarazadas que se encuentren cursando la 12ª semana de su embarazo o por encima de esa semana, y que tengan un elevado riesgo de tener una trisomía del par 21 en sus fetos, que genera las características cognitivas y corporales propias del síndrome de Down.

El delegado de los discapacitados del gobierno alemán, Hubert Hüppe, exigió la prohibición de la prueba, argumentando una incompatibilidad con el marco legal vigente actualmente en su país, e igual reclamo hicieron asociaciones éticas e iglesias que ven un gran peligro de selección de fetos.

Sin embargo, el estado federado de Baden-Württemberg, sede del laboratorio y por ello competente en la materia, decidió no prohibir la prueba por no ir en contra de las premisas legales de la ley de diagnóstico genético.

LifeCodexx desarrolló su prueba sanguínea con datos recabados entre 2009 y 2012 en cooperación con centros y clínicas prenatales en Alemania y en Suiza.

El test posibilita el reconocimiento del síndrome de Down sin acceder al útero materno. Hasta el momento, la prueba implicaba una punción en la bolsa amniótica que podía ocasionar problemas médicos e incluso un aborto.

Según la empresa, el nuevo test podría reducir el número de los abortos "notablemente" y "salvar la vida de hasta 700 niños sólo en Alemania, que mueren al año derivados de complicaciones por análisis invasivos".