Un suboficial de policía que fue pasado a disponibilidad, por presunto manejo irregular de horas extras en marzo del año pasado, denunció que sus dos autos fueron incendiados y vinculó los hechos a acusaciones que hizo, en el marco de esa causa, contra varios ex integrantes y actuales miembros de la fuerza de seguridad por amenazas y daños a su propiedad. El pasado 22 de octubre prendieron fuego su Peugeot 504, algo que según contó ya le había pasado este año con el otro vehículo que poseía. Además, indicó que le balearon el frente de su vivienda.

Asegura que la Justicia no avanzó en la causa –que considera que fue "armada– por la que fue desplazado: supuesto manejo irregular de horas extra (llamadas Ospe en la jerga policial). En diálogo con Rosario3.com, Jonatan Avaro manifestó estar "preocupado" por las reiteradas amenazas sufridas contra él y su familia. Deslizó que están vinculadas con la denuncia que realizó este año contra ex miembros y actuales integrantes de la Policía santafesina. De acuerdo a su relato, aportó pruebas a la Fiscalía de Violencia Institucional para que se esclarezca su causa –a la que considera "armada" por otros agentes– pero la investigación no avanzó. Además, cuestionó no contar con custodia, ya que afirma que la Fiscalía de Flagrancia ordenó que se lo incluyera en el Programa de Protección de Testigos.

"En agosto de este año me llamaron a las cuatro de la mañana y me amenazaron. Puse mi teléfono a disposición para que le hagan pericias y no tomaron ninguna medida. Después me prendieron fuego el auto (Fiat modelo Berlina 125 color azul). En abril dispararon tres veces contra el frente de mi casa. Y el pasado sábado 22 de octubre a la noche incendiaron el único vehículo que me quedaba (Peugeot 504)", resumió el agente, que dice vivir actualmente de "changas, de cartonear, de dar clases de batería". 

Según mostró el efectivo pasado a disponibilidad a Rosario3.com la planilla por la que le imputan manejo irregular de horas extra (Ospe), por ende, defraudación al erario público, tiene una firma similar en casi todos los nombres de los agentes, lo que supone que la hizo una misma persona. "Esto quiere decir que firmó una sola persona. ¿Quién no se da cuenta que es irregular el documento? ¿Cómo puede ser que ese papel lo hayan avalado los superiores? Todos fueron partícipes de esta maniobra por omisión de deberes de funcionario público y por falsificación de documento público", sostuvo.

La observación de Avaro es sobre la columna derecha, donde las firmas son todas parecidas. (Rosario3.com)

Para Avaro, el ex titular de la Unidad Regional II Miguel Oliva, el ex jefe de Nodo Rosario y actual jefe de la Policía santafesina, José Luis Amaya, y el ex jefe de la Policía Omar Odriozola junto con otros miembros son "responsables" de la falta de investigación de la planilla por la que fue pasado a disponibilidad, según denunció el pasado 3 de agosto. "Puse a disposición un perito caligráfico para que determine que la firma que figura en el papel no es la mía y no se hizo. El documento fue elevado a los superiores, ellos estaban anoticiados de lo que estaba pasando", concluyó.

"De la única manera que me van a callar es estando muerto. Me obligaron a sacar a mi familia de Rosario, a mi mujer y a mi nena. Ya no sé para qué voy a denunciar el incendio del último auto, ¿qué garantías tengo? Me están haciendo la vida imposible, se me ríen en la cara", señaló. 

La causa por la que el agente fue pasado a disponibilidad tendría su dictamen –de acuerdo a la información de Avaro– este mes. "La va a hacer caer y me van a exonerar. Con los datos que aporté debería investigar y procesar a todos los denunciados", comentó. 

Desde que fue apartado de la fuerza de seguridad, Jonatan manifiesta vivir "de changas, de cartonear y de dar clases de batería". "Ya no confío en la Justicia. Sí en la Policía, pero no en quienes la conducen", finalizó.

Consultado sobre el motivo por el cual hizo la denuncia este año cuando lo pasaron a disponibilidad el año pasado, el efectivo respondió: "Tardé porque me pegué a la reglamentación. Cuando se ordenó el pase a disponibilidad recusé la medida. Elevé la nota y la respuesta tardó entre 15 y 20 días. Cuando pasaron aproximadamente cuatro meses de que la investigación no avanzaba me presenté espontáneamente ante la Fiscalía. La semana siguiente me llega un escrito donde dicen que hacen lugar a mi reclamo pero no al contenido. En el contenido, para que se entienda, estaban las pruebas que aporté sobre la falsificación de documento público y las órdenes de servicio. Desde ahí pasaron seis meses y me disparan tres tiros al frente de mi casa. Después me citan, pongo a disposición el GPS de mi móvil, la pericia caligráfica y la planilla que está falsificada y no se profundizó. La Unidad de Flagrancia de la Fiscalía ordenó que integre el Programa de Protección de Testigos y la fiscal Bartocci la dejó sin efecto".

Según precisaron fuentes judiciales a este medio, Avaro no radicó la denuncia por el incendio de su Peugeot 504 y no hizo la denuncia contra sus superiores ante la Fiscalía. No obstante, Rosario3.com tiene la copia del trámite hecho en el Centro Territorial de Denuncias del Centro Municipal Distrito Centro. Por otra parte, agregan que el otro auto incendiado, un Fiat modelo Berlina 125 color azul, aparentemente, estaba en un taller mecánico al momento del hecho. 

Bartocci recibió las pericias de Bomberos por el primer vehículo que fue prendido fuego y remitirá la causa a la Unidad de Investigación y Juicio para no tenerlo como víctima y acusado en su poder. 

La causa

En la audiencia imputativa del 22 de junio de este año, la fiscal Karina Bartocci atribuyó al agente "no haber cumplido con el mínimo de ocho horas diarias y 36 semanales de servicio ordinario previsto por la legislación vigente (Circular interna Unidad Regional II nº 101 del año 1987) durante enero y febrero del 2015"; haberse "excedido en la cantidad de horas extraordinarias"; "haber percibido indebidamente ingresos en fraude de la Administración Pública Provincial". La calificación legal de los hechos es la de "incumplimiento de deberes de funcionario público (artículo 249 del Código Penal) y defraudación a la Administración Pública (artículo 147, inciso 5 del Código Penal).

Sobre la imputación, Avaro advirtió que según el memorándum 281/15 "para todo el personal policial que realice servicio de hora Ospe debe saber que las mismas no son de carácter voluntario si no que es una orden de servicio con la modalidad paga".

"Me pasan a disponibilidad el año pasado. Dicen que el 1º de enero figura que trabajé de 22 a 6 en operativos de control de taxis y a su vez de 0 a 8 pasé horas en el comando radioeléctrico. Sin embargo está documentado (foja 101 del libro de guardia de la comisaría 14ª) que yo participé de los procedimientos Felices Fiestas de 15 a 21 y que después de irme a mi casa a bañarme volví al servicio. Lo que estoy diciendo consta en documentos", precisó el agente a este medio.

De acuerdo al relato de Avaro, el "armado" de la causa por presuntas irregularidades en el manejo de horas Ospe está ligado a procedimientos donde "hizo las cosas bien". "En un operativo recuperé todos los vehículos que habían sido denunciados como robados en el depósito judicial. A la semana ocasionalmente hubo un incendio ahí. A los autos de alta gama le faltaban partes, no a todos. Por este tipo de cosas digo que me quisieron sacar del medio, porque nunca trancé con nadie", declaró.