La mayor instalación de energía nuclear estadounidense, en Palo Verde, Arizona, fue cerrada este viernes al descubrirse que un empleado había ingresado con un pequeño explosivo en su camioneta.

El empleado fue arrestado cuando ingresaba a la central nuclear de Palo Alto, mientras los responsables de la seguridad cerraron los accesos a la planta.

El artefacto encontrado en el vehículo fue descripto como un caño que contenía una sustancia sospechosa. La policía del condado de Maricopa informó que los investigadores estaban interrogando al detenido.

"Durante el incidente la planta continuó trabajando normalmente y no se informó de eventuales peligros para la población", afirmó el vocero de la central nuclear, que suministra energía eléctrica a 4 millones de personas.

La alerta que disparó el incidente fue la más baja de los cuatro tipos de emergencia previstas por las autoridades de seguridad en estos episodios.

La central de Palo Verde, que es operada por la Arizona Public Service, está ubicada a 50 kilómetros al oeste de la ciudad de Phoenix y abastece de electricidad a clientes en los estados de Arizona, Nuevo México, Texas y California.