El estrés, la mala postura frente a la computadora y la excesiva cantidad de horas sin cambiar de posición provocan contracturas y dolores en el cuello. Terminar la jornada laboral sin padecer esas molestas contracturas parece imposible para muchos.

“Entre las principales causas de dolor de cuello o espalda son las contracturas musculares, explica el doctor Juan Pablo Guyot, médico especialista en Ortopedia y Traumatología. “La mayoría de las veces éstas se originan por una mala postura, falta de ejercicios y a veces incluso secundario a situaciones tensionales”.

“Por supuesto que no son las únicas, ya que en otros casos existen dolores mecánicos más importantes originados por un desgaste discal, cambios degenerativos facetarios o un disbalance del eje”, agrega.

Desde este punto de vista, “el ritmo de vida influye enormemente ya que la mayor cantidad de personas que tienen trabajos de escritorio tienden a llevar una vida sedentaria. Eso repercute directamente sobre la postura y los síntomas. No existe un patrón claro que indique quiénes sufren mayores dolores. Ni siquiera tiene relación exclusivamente con los estudios por imágenes. Los dolores en la espalda y el cuello obedecen a múltiples factores que hacen impredecible poder definir a aquellos que tengan mayor tendencia”.

El doctor Guyot aclara que “por supuesto que tienen una mayor predisposición las personas sedentarias, con exceso de peso o con alguna alteración funcional pero en muchos otros casos no existe un patrón claro”.

Cuando la persona no puede evitar ni reducir la cantidad de horas en la misma postura, el profesional destaca que “lo importante es poder intercalar con alguna actividad. Existen grandes empresas que invierten en la distracción de sus empleados y la práctica deportiva debería ser una de ellas. En lugar de tomarse un rato para ir a tomar un café o fumar un cigarrillo aquellos con dolores deberían tener una mayor dedicación por la elongación o la actividad física. Hoy en día existen lugares para practicar deportes en todos lados”.

En cuanto a los ejercicios que se deberían realizar, Guyot expresa que “sería interesante discutirlos con un kinesiólogo con experiencia, además de que debería elaborarse uno para cada persona, pero a grandes rasgos el objetivo debería estar enfocado en el fortalecimiento de los músculos que rodean la columna así como la elongación de isquiotibiales para un correcto balanceo de la pelvis”.

Fuente: Infobae